Este viernes comenzó la XXXIII Vuelta a Castilla y León, con una etapa de 182 kilómetros entre Alba de Tormes y Salamanca.
El corredor burgalés del Movistar Team venció en la línea de meta. Barbero, uno de los favoritos para lograr la victoria final en Ávila, ganó con holgura el sprint disputado en la calle María Auxiliadora de Salamanca.
Salamanca recibió al pelotón con expectación, la misma con la que Alba de Tormes la había despedido esta mañana, principalmente infantil. En ese punto, el pelotón circuló junto a la Basílica de Santa Teresa, en el año que se homenajea al Año Jubilar Teresiano. Tras el tradicional corte de cinta y pocos kilómetros después, un grupo de cuatro corredores saltó del gran grupo. Llegó a alcanzar una diferencia de seis minutos. Se trataba del letón Gatis Smukulis y el español Delio Fernández, ambos del Delko Marseille Provence, de Francia, el británico Danial Whitehouse, del equipo nipón Interpro, y el ruso Alexander Evtushenko, que se descolgaría más tarde dejando la fuga en tres corredores.
Al paso por Guijuelo, la población chacinera se echó a la calle para vivir la emoción de la meta volante, que daba paso a la bella estampa de la Sierra de Francia y el primer alto de montaña, el de Valero, seguido del puerto de Los Santos, momento en el que el viento comenzó a entrar de cara, ya en sentido Salamanca, y los tres escapados vislumbraban cada vez menos la posibilidad de no alcanzar la meta sin la ayuda del pelotón. El nivel de carrera era alto, con medias que superaban los 40 kilómetros por hora en las primeras tres horas de carrera.
A falta de 21 kilómetros y poco después del nuevo paso por Alba de Tormes, ya encaminados hacia la ciudad charra, el trabajo de los equipos sin representación adelante motivó el final de la numerosa escapada. Todo hacía presagiar una llegada agrupada. En los últimos diez kilómetros, habitual en este tipo de carreras y de llegadas, se registraron varios intentos de salto del pelotón, sin fruto, siempre cancelados por el equipo español Caja Rural y el portugués W52 Porto, con interés en este final.
La entrada en la capital del Tormes, con gran presencia de aficionados en las aceras del Paseo de Canalejas y en el puente de Felipe VI, a gran velocidad, finalizó de la mejor forma posible para el corredor burgalés, que además se hizo con los segundos de bonificación de cara a la clasificación general. Barbero tiene entre ceja y ceja una carrera, la de casa, que persigue ya desde hace varias ediciones. La tiene más cerca…
Este sábado se disputará la segunda etapa, entre Valladolid y Palencia, de 178 kilómetros.
Fotos: Ical
