La Policía Nacional de Salamanca detuvo el sábado pasado, a las 4.45 horas, a tres jóvenes de entre 20 y 23 años que acababan de robar en un piso de la avenida Portugal.
La inquilina de la casa y su hija estaban en la vivienda cuando detectaron la presencia de los delincuentes. La mujer avisó a la Policía y se encerró con su hija en una habitación.
Al llegar los agentes se cruzaron con uno de los asaltantes cuando salía del portal del edificio, vieron a otro colgado de la ventana que da al patio en el 2º piso y al tercero escondido en una caseta que había en el patio de luces del edificio.
Una vez detenidos los presuntos autores y asegurados los efectos, los agentes llamaron al timbre de la vivienda, sin que nadie abriera por lo que avisaron a los Bomberos para que abrieran la puerta.
Una vez dentro los agentes comprobaron que los ahora detenidos podrían haber entrado a través de la puerta de la terraza, que estaba abierta y con el cristal fracturado.
El resto de las estancias de la casa estaban desordenadas, como si las hubieran registrado, y en una de las habitaciones localizaron a la inquilina acompañada de su hija, quien manifestó que no respondían a las llamadas del timbre de la puerta por si los ladrones aún estaban allí
Los delincuentes llevaban cuando fueron detenidos varias cámaras fotográficas y objetivos.
Este lunes se registraron varios pisos, donde vivían los detenidos, en los que los agentes intervinieron numerosos artículos que se sospecha han sido robados en otras viviendas.
A los tres detenidos le constan antecedentes por delitos contra la propiedad, y una vez finalizadas las diligencias pasaron a disposición judicial del Juzgado de Instrucción de guardia de Salamanca.
Dos de ellos ingresaron en Topas y uno quedó en libertad con cargos.
