El rector de la Usal, Ricardo Rivero, considera que el IV Encuentro de Rectores Universia convierte a la ciudad charra en “la capital mundial de la educación superior”
Carlos Tabernero/ ICAL. La Universidad de Salamanca afronta el lunes 21 y el martes 22 de mayo la cita académica de «mayor envergadura» de la celebración de su VIII Centenario junto a la firma en septiembre de la ampliación de la Magna Charta de Universidades: el IV Encuentro Internacional de Rectores Universia.
Una reunión que congrega a más de 700 rectores y representantes universitarios de todo el mundo, ante la presencia del rey de España y el presidente del Gobierno, y donde el Estudio salmantino, además de actuar de anfitrión, tratará de reivindicar su papel como «puente académico» y lugar central sobre el que pivote el futuro Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior, al modo de Bolonia en Europa, a través de la ponencia conjunta que el rector de la Usal, Ricardo Rivero, y la secretaria general de Iberoamérica, Rebeca Grynspan, realizarán el lunes por la tarde.
¿Cuál va a ser la postura de la Universidad de Salamanca en relación a la revolución digital y su impacto en las sociedades y en las universidades?
Estamos decididos, y realizando ya, la transformación digital de la Universidad, así que la propuesta del primer eje nos parece fundamental y nos sumamos a su planteamiento. También creemos que es necesario dar un nuevo impulso a los desafíos de la investigación. Yo intervendré, además de como ponente en la sesión de la tarde del lunes sobre el Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior, en una de las mesas sobre el tercer eje, que es la contribución de la universidad al desarrollo de su entorno. La Universidad de Salamanca va a tener mucha voz en este encuentro, porque no solo alojamos el encuentro y vamos a recibir a todos los rectores de los 27 países representados, sino que además expondré las propuestas sobre el Espacio Euroiberoamericano y sobre contribución al desarrollo territorial.
Ese tercer eje también hace referencia a la empleabilidad de los estudiantes. ¿Está preparada la universidad en su conjunto, en un contexto global, para formar a los alumnos hacia ese futuro con un 75 por ciento de profesiones que ahora mismo no existen? ¿Qué pasos faltan por dar?
Tenemos que estar muy atentos a las transformaciones del mercado de trabajo, colaborar siempre con las empresas que han de anticipar estos cambios, y adaptar nuestra oferta de titulaciones para favorecer la empleabilidad de nuestros egresados. Contamos con varias titulaciones que tienen porcentajes de empleabilidad altísimos. Pero hemos de lograr mejores resultados en todas ellas. El Servicio de Inserción Profesional, Prácticas y Empleo (SIPPE) está trabajando muy bien en este sentido y hay varias estructuras de la Universidad, como el Instituto Multidisciplinar de Empresa o colaboraciones puntuales con entidades privadas y fundaciones, que nos ayudan mucho para avanzar en esta dirección.
En cuanto al segundo eje, ¿se aprovechará la visita del presidente del Gobierno para demandar ese aumento de recursos para investigación y acabar con la diferencia que existe con respecto a otros países del entorno?
Siempre hay que reivindicar un apoyo al I+D+i, porque es factor de desarrollo de los países y hemos de conseguir que todas las instituciones, en todos los niveles, apoyen con todos los recursos posibles. Agradezco que lo esté haciendo de manera pionera el Ayuntamiento de Salamanca y también la Diputación, pero intentamos lograr también el mayor número de proyectos de investigación en el entorno autonómico, estatal y europeo, porque todos los recursos que se inviertan en investigación están bien invertidos.
Al finalizar el IV Encuentro Internacional de Rectores Universia, se redactará la ‘Declaración de Salamanca’. ¿Qué principios se van a recoger dentro de este documento?
Lo veremos el día 22 de mayo, pero la ‘Declaración de Salamanca’ planteará propuestas concretas en torno a cada uno de los tres ejes, y estoy convencido de que planteará también avances en la colaboración interuniversitaria a nivel europeo, iberoamericano y global, porque también hay rectores de otros continentes y aunque la Universidad de Salamanca tiene una posición privilegiada en la relación entre las universidades de Europa e Iberoamérica, esto no significa que limite su proyección internacional a las relaciones entre ambos continentes.
¿Hasta qué punto puede salir reforzada la imagen y el posicionamiento internacional de la Universidad de Salamanca después de este IV Encuentro Internacional de Rectores Universia?
Espero que hasta un punto importante. Lo cierto es que el prestigio de la Universidad de Salamanca ya es mucho, pero convocar aquí a el número de rectores que van a venir, genera en el futuro un efecto multiplicador de resonancia y de asociación de Salamanca a la imagen de una universidad internacional, abierta al mundo, y participativa en los grandes debates. La nuestra es una universidad antigua pero también innovadora, y eso se va a comprobar en el Encuentro de Universia.
Recibe Salamanca el testigo de grandes ciudades como Sevilla, Guadalajara (México) y Río de Janeiro en la organización del IV Encuentro Internacional de Rectores Universia. ¿Qué supone para el posicionamiento internacional de una ciudad como Salamanca un encuentro así?
Salamanca se convertirá los días 20, 21 y 22 de mayo en la capital mundial de la educación superior. La elección, coincidiendo además con el VIII Centenario de la Universidad, demuestra el reconocimiento y el prestigio que la Universidad de Salamanca sigue recibiendo a nivel internacional. Nuestra proyección iberoamericana, pero también en Europa o Japón, son más que notables. Y Universidad y ciudad de Salamanca están en una simbiosis perfecta, son conceptos que se asocian. La nuestra es una universidad que convoca mucho consenso y mucha concordia, porque está identificada con valores como la defensa del humanismo, de los Derechos Humanos, de la persona, del compromiso democrático, y del cultivo de todas las artes y las ciencias, que son sin duda la mejor imagen del arquetipo de universidad.
¿Sitúa este IV Encuentro Internacional de Rectores a Salamanca como eje vertebrador entre la educación superior de España e Iberoamérica, como sucedió en el siglo XVI?
Esto es, en mi opinión, lo más importante y el elemento diferencial que distingue a la Universidad de Salamanca con respecto a otras grandes y excelentes universidades. Ninguna otra en toda Europa puede ofrecer un vínculo tan estrecho y sostenido en el tiempo, un puente académico entre Europa e Iberoamérica como el que ofrece y ha mantenido durante más de 500 años la Universidad de Salamanca. Además de haber sido la más antigua de las universidades españolas y la raíz del sistema universitario iberoamericano y en español, somos el enlace perfecto entre el Espacio Europeo de Educación Superior y el Espacio Iberoamericano de Educación Superior.
¿Hay confianza en poder dar el primer paso hacia esa convergencia que supone el Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior en este IV Encuentro Internacional de Rectores Universia? ¿Qué importancia tendrá, en ese sentido, la conferencia conjunta que usted y la secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan, darán el lunes por la tarde?
Rebeca Grynspan es una personalidad respetadísima en el panorama internacional como intelectual de renombre y una mujer muy comprometida con los desafíos de nuestro tiempo. Estamos trabajando con ella en una ponencia conjunta que tendrá lugar el lunes por la tarde para dar no uno sino muchos pasos en la aproximación de los sistemas universitarios de uno y otro lado del Atlántico.
Vamos a trabajar en la creación de condiciones que favorezcan la movilidad de profesores y estudiantes en Iberoamérica y desde Europa a Iberoamérica y desde Iberoamérica a Europa. También trabajamos para que ese Espacio incluya el reconocimiento de titulaciones, redes internacionales de universidades, y también posiciones conjuntas en cuestiones tan importantes como la medición de los indicadores de calidad de las universidades.
Avanzar en esas líneas, en un ECTS euroiberoamericano, en los convenios de cooperación universitaria, en las redes, en los títulos conjuntos de universidades, y en el reconocimiento y los ránkings, permitirá construir el Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior.
¿Será entonces Salamanca el punto de unión entre la educación superior de Europa e Iberoamérica como lo fue en su momento Bolonia en la construcción del Espacio Europeo de Educación Superior?
Debe serlo. Ninguna otra universidad está trabajando tanto en esta línea. Tenemos aquí el Encuentro de Universia, pero poco después, los días 29 y 30 de mayo y 1 de junio, se reúne en Salamanca el Grupo de Coimbra, un grupo de universidades europeas muy potente y muy prestigioso. Y vamos a contar con la presencia en estos foros de los principales responsables de educación superior y universidades de la Comisión Europea. Si vienen los responsables más importantes de la educación superior en Iberoamérica a Salamanca, y vienen también los responsables más importantes de la educación superior de la Unión Europea, es porque reconocen que el punto para apoyar la palanca de ese Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior es nuestra universidad.
¿Qué valores debe contener ese Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior?
Los valores deben ser universales, pero también vinculados a nuestra mejor tradición. El humanismo, la democracia en la universidad, pero también los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas: educación inclusiva, sostenibilidad, equidad, igualdad de género…
Esos objetivos, que lo son de la agenda global, deben ser incorporados también a los grandes procesos de transformación de las universidades, porque las universidades son instituciones con un papel clave en la transformación social.
¿Qué recepción están teniendo estas ideas y el concepto de ese Espacio Euroiberoamericano de Educación Superior en las universidades de ambos lados del Atlántico?
Hemos expresado estas propuestas en encuentros anteriores. Hace pocos meses tuvo lugar en Salamanca un encuentro sobre Objetivos de Desarrollo Sostenible y las propuestas fueron bien recibidas. También vamos a participar en el Comité que se ha nombrado para la celebración del Centenario de la reforma universitaria cordobesa, en Argentina, que es un acontecimiento muy importante al otro lado del Atlántico, y las propuestas que trasladamos a Córdoba han sido también muy bien recibidas. Hemos hermanado ambos acontecimientos y estamos de acuerdo en la necesidad de mejorar la movilidad de profesores y estudiantes, así como hacerlo desde principios compartidos vinculados al desarrollo de nuestras sociedades y los ODS de Naciones Unidas.