Los miles de antiguos alumnos de la Universidad de Salamanca que han participado en el encuentro de Alumni para celebrar el VIII Centenario se han despedido con un acto realizado en el Patio de Escuelas. El evento ha contado con Sergio Martín y José Antonio Sayagués para realizar el pregón.
José Antonio Sayagués ha optado por un discurso anecdótico en el que ha manifestado lo que ha significado para él la Universidad de Salamanca. “Para mí, la Usal ha representado tres pilares importantes, que son como tres grandes árboles que constituyen la flora de nuestra tierra, que son las encinas”, manifestó.
“Una de ellas es que me hizo adicto al conocimiento; otra es que me abrió el camino para encontrar y poder sacar adelante mi verdadera vocación desde cuando yo era muy pequeño, que era ser actor; y la tercera es que me hizo entender una cosa y siempre preguntarme lo siguiente: ¿de dónde vengo?, ¿dónde estoy? y ¿dónde quiero ir?”.
Sergio Martín, por su parte, manifestó que “no venimos a sentar cátedra, venimos a contar nuestra experiencia”. Refiriéndose a Sayagués, señaló que “su vocación de actor la cimentó aquí, en Salamanca. Yo la mía de periodista exactamente igual. Empecé en Radio Universidad en un proyecto maravilloso donde empecé a hacer mis primeros pinitos detrás de un micrófono y yendo a ruedas de prensa”.
Acompañó su pregón con alguna anécdota pequeña, lo que considera que más hará que todos se puedan sentir reflejados en su propia historia. Indicó que esas cosas “también es universidad: los amigos, los compañeros, esos ataques de risa tontos que nos entraban y que luego explicas fuera y no tienen mucho sentido”.
Martín considera que “el VIII Centenario ha sido una oportunidad estupenda y bien aprovechada por la Universidad de Salamanca para hacer una reflexión. Todo el mundo sabe que las universidades públicas han estado en estos últimos tiempos un poco en entredicho, y el hecho de que la Usal haya cogido la bandera de las universidades públicas en este VIII Centenario y haya reunido aquí a 700 rectores llegados de todo el mundo para pensar cómo queremos que sean los siguientes 800 años de esta universidad, para intentar dejarla un poquito mejor de como nos la encontramos, el simple hecho de hacer el esfuerzo ya merece la pena”.
“A eso le unes que la conclusión que se ha llegado en el encuentro es que los conocimientos son muy valiosos, pero los valores más, en una crisis de valores tan potente como la que hemos vivido en los últimos años, yo creo que ya ha merecido la pena”, añadió.
Sayagués también quiso destacar que este acontecimiento “viene a revitalizar la figura del conocimiento”. “El país está inmerso en una situación muy crítica. Es necesario regenerar toda la sociedad y volver a recuperar valores que tienen que ver con la responsabilidad, el sentido del trabajo bien hecho, el sentido de la generosidad, el de la ética, el de la limpieza, el del compromiso y, sobre todo, los valores humanistas que esta universidad siempre ha tenido por bandera”.
“Es muy importante la generación que viene”, añadió, “no la podemos dejar huérfana de estos valores. Si la generación que viene no absorbe estos valores, este será un país que se quiebre tarde o temprano”.
Texto y foto: Paula Castro Morán
