La DGT tiene desplegados 38 radares en las carreteras de Salamanca, 24 de ellos en carreteras secundarias y solo 14 en autovías y nacionales.
De todos los radares que controlan la velocidad en las carreteras de la provincia, 30 son móviles, es decir, que los agentes de Tráfico de la Guardia Civil instalan en esos puntos el coche o un radar con trípode, y los ocho restantes son fijos.
Siete de los fijos están en las vías principales (autovías y nacionales), entre ellos uno de los que más recauda de España (el que hay junto a la rotonda de Buenos Aires en la A-66) y solo uno en secundarias, la SA-20, en el polígono El Montalvo, justo junto a la incorporación desde la rotonda de la carretera de Béjar.
Los móviles se localizan, fundamentalmente, en las vías secundarias. Solo siete están en vías principales. Concretamente, cuatro en la N-630 y tres en la N-620. No hay ninguno en autovías.
Las carreteras más vigiladas por radares son la N-630 (seis radares en su trazado pro Salamanca), y la N-620 y la autovía A-62 que transcurre en paralelo, con tres cada una de ellas.