El juzgado de instrucción número 11 de Madrid ha dejado en libertad sin medidas cautelares al actor Willy Toledo acusado de un presunto delito de ofensa a los sentimientos religiosos.
El actor se ha negado a declarar ante el juez y ha reiterado mediante un escrito que no ha cometido ningún delito y que no considera «necesario» presentarse ante «ningún juez ni fiscal».
Toledo compareció ante el juez tras pasar la noche en los calabozos, ya que fue detenido para evitar una nueva incomparecencia. A la salida ha sido recibido entre aplausos por decenas de personas al grito de «me cago en Dios».
«Lo que hice lo seguiré haciendo mañana y pasado. No he acudido a las citaciones judiciales no porque tenga ganas de pasarme ocho meses con todo esto a mi espalda sino, primeramente porque me parece que no he cometido ningún delito y porque me parece absolutamente tercermundista que en este país todavía existan cinco artículos del Código Penal referentes a las ofensas a los sentimientos religiosos», ha dicho.