El Gobierno regional del PP desvía en Salamanca más de un millón de euros a hospitales privados para realizar intervenciones quirúrgicas mientras en la pública mantiene quirófanos cerrados, infraestructuras infrautilizadas y recortes tanto en derechos como en el número a los profesionales.
Los socialistas consideran que es «inadmisible» que el Complejo Hospitalario de Salamanca, que cuenta con la mayor lista de espera en cuanto a número de pacientes y de días de demora de la Comunidad, destine este año más de un millón de euros a la externalización de intervenciones quirúrgicas mientras mantiene infrautilizadas sus instalaciones mediante el cierra quirófanos y recortes de derechos laborales y del número de profesionales en las plantillas.
Para el PSOE las listas de espera no son un problema coyuntural como quiere hacer ver la Consejería de Sanidad, sino estructural, y todo por la falta de recursos y una inadecuada e ineficaz gestión sanitaria.
La solución a juicio de los socialistas no pasa por poner parches desviando dinero público a la sanidad privada, «sino por aplicar una gestión diferente utilizando el total de los recursos públicos de los que disponen sus hospitales y el potencial de su personal altamente cualificado. Es difícil de entender que los hospitales públicos no estén funcionando por las tardes o fines de semana y solamente se estén limitando a las urgencias durante determinados horarios, y a los enfermos hospitalizados, con las graves listas de espera que tienen».
Y en esta misma línea, los socialistas consideran que no se puede forzar y obligar a los pacientes a aceptar una operación en la sanidad privada para reducir su tiempo de espera «sabiendo que es en la sanidad pública donde se tienen los mayores controles de seguridad y calidad».
A la Junta y al Gobierno regional del PP también se les olvida informar que cuando desvía un paciente a la privada, el seguimiento de su proceso quirúrgico no será controlado por el médico que le ha intervenido, ni tampoco en el caso de que hubiera complicaciones, sino por la sanidad pública y, por tanto, el coste de esa intervención se duplica.
Considera que los pacientes, además, tienen derecho a ser atendidos en los hospitales públicos «y es injusto que desde los responsables sanitarios de la Junta se busquen estrategias y artimañas para obligarles a ser intervenidos en la sanidad privada bajo la amenaza de ser enviados al final de la lista de espera y ampliar la demora para su intervención en caso de no aceptar».
Los socialistas salmantinos afirman que el Complejo Asistencial Hospitalario de Salamanca tiene capacidad para asumir estas intervenciones quirúrgicas desviadas a la sanidad privada mediante una mejor gestión de los recursos y la financiación. Es una auténtica irresponsabilidad que la Gerencia del Hospital de Salamanca, con el aval de la Junta, no optimice al máximo los recursos públicos y se tengan que asumir los elevados gastos de las derivaciones sin control alguno, tanto de los fondos y de esos gastos, como de la calidad de las intervenciones, lo que va en detrimento de la sanidad pública y de la seguridad de los pacientes.