Hay veces que lo que mal empieza, mal acaba. Algo parecido le ha pasado este domingo a las jugadoras del Avenida en Girona, donde la derrota fue abrumadora 79-53 ante el eterno rival. Donde la derrota duele más
Los cuatro cuartos han estado dominadas por las catalanas. Al finalizar los primeros minutos ya tenían una ventaja de 18 arriba 27-9. Las salmantinas no podían hacer nada. El Spar Citylift Girona era un auténtico vendaval. A las azulonas no les salía nada.
Todavía quedaba mucho partido, pero los ánimos iban para abajo y así al descanso, la hinchada pedía una épica, porque las de Girona se iban de 20 puntos. 44-24.
Lo cierto es que no mejoró nada. Fue empeorando por momentos. Y no se podía recortar nada, es más la ventaja se iba incrementando y así al finalizar el tercer cuarto, las de Girona ganaban por 23 puntos. 57-34.
Casi se pedía un milagro, que no se produjo. No había tiempo, ni tampoco recursos para una remontada y la ventaja se iba incrementando por momentos. Las de Girona encontraban canasta y las azulonas ni la veían.
El marcador se congeló con 79-53. Una derrota en la cancha del rival es más que una derrota.