Salamanca amaneció este domingo envuelta en una densa niebla que tardó en disiparse para dejar al descubierto un sol espléndido.
Esta situación se repetirá a lo largo de la semana, con temperaturas nocturnas rozando los cero grados y máximas diurnas algo moderadas, rondando los quince grados.
Así, pues, serán unas navidades sin nieve y sí con una niebla persistente con tendencia a desaparecer a partir del mediodía.