El crecimiento económico tras la crisis de 2008 ha beneficiado desproporcionadamente a las rentas altas. Así, el año pasado aumentaron en 16.500 los hogares en los que no entró ningún tipo de ingreso, alcanzando los 617.000, según constata el informe Desigualdad 1-Igualdad de Oportunidades 0, elaborado por Oxfam – Oxfam Intermón en España – publica este lunes coincidiendo con la celebración en Suiza del Foro Económico Mundial de Davos.
Mientras los ultramillonarios –personas cuyos activos netos equivalen o superan los 40 millones de euros- aumentaron en un 4%, llegando a la cifra récord de 1.690 personas.
La ONG señala que en España, la pobreza aumentó durante la crisis 4 veces más de lo que se ha reducido con la recuperación.
Esta polarización es el reflejo de la grave crisis de desigualdad que vive el planeta. La creciente brecha entre las personas ricas y pobres está poniendo en peligro la lucha contra la pobreza y castiga sobre todo a mujeres y niñas.
En el mundo, la fortuna de los milmillonarios -9 de cada 10 son hombres- aumentó en un 12% en el último año, es decir, 2.500 millones de dólares diarios. Sin embargo, la riqueza de la mitad más pobre de la población -3.800 millones de personas- se redujo en un 11%, según detalla el informe con el análisis internacional “¿Bienestar público o beneficio privado?”, que publica también la organización.
Oxfam Intermón en España indica que cuanto más desigual es una sociedad, más condicionado estará el futuro de niños y niñas por el nivel de ingresos del hogar en el que nacieron y menos igualdad de oportunidades habrá entre unos y otros. Si no se reducen los actuales niveles de inequidad, la OCDE estima que en España se necesitarán 120 años, cuatro generaciones, para que una familia del 10% más pobre alcance los ingresos medios.
En esta línea, el informe detalla cómo la pobreza y la riqueza en España se heredan. Si se nace en una familia de ingresos altos se ganará un 40% más que si se crece en un hogar con ingresos bajos. Además, el sistema educativo es ahora más inequitativo que antes de la crisis. De todas las personas que abandonan prematuramente sus estudios, 1 de cada 2 pertenece al 20% de hogares con menos ingresos.
“La desigualdad afecta a los derechos y oportunidades que tengamos en nuestra vida relacionados con la salud, esperanza de vida o la participación ciudadana, entre otros. Por ejemplo, si vives en un barrio rico de Barcelona tu esperanza de vida será de 11 años más que si tu casa está en un barrio pobre. En Madrid, esta diferencia alcanzaría los 7 años. En España y en el mundo el sistema no solo no es capaz de reducir la pobreza, sino que ahora es más aguda. Reducir la desigualdad y mejorar la movilidad social es condición sine qua non para garantizar la igualdad de oportunidades”, resalta el director.