La incertidumbre se mantiene en el rescate del pequeño Julen, que lleva metido en una galería de 110 metros de profundidad por 25 centímetros de diámetro desde el domingo, 113 de enero.
Este miércoles, tras el imprevisto del martes que obligó a retrasar el encamisado de la galería, se ha detectado otro saliente en la pared de la galería, a 50 metros de profundidad, que impide que baje la tubería metálica que se quiere instalar para evitar desprendimientos.
Como esto ha ocurrido a tanta profundidad se reducirá el diámetro de los últimos metros de la tubería para que pueda pasar y puedan iniciar su trabajo los mineros de rescate.