11.000 personas se esperaban este viernes en el besapiés de Jesús Rescatado, en la iglesia de San Pablo, para realizar sus ofrendas y peticiones. El buen tiempo ha animado a los feligreses y devotos del Cristo a pasarse por allí.
Sobre las 11:45 de la mañana la cola ya llegaba a las puertas de los Juzgados de Salamanca. Hemos podido hablar con algunos de los sufridores de esta cola mientras esperaban para entrar en el templo.
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Pilar y Antonio, un matrimonio que asiste todos los años desde Calvarrasa de Abajo, comentan que cada año tienen algo por lo que pedir. Piden por ellos mismos o por sus hijos y nietos, para que todo les vaya «lo mejor que se pueda».
Mercedes, Rosa y Carmen son tres amigas que acuden juntas desde hace veinte años. «El Santo siempre nos concede lo que le pedimos», afirman.
Jesús y María del Mar, llevan asistiendo desde que llegaron a Salamanca por trabajo hace unos ocho años. Afirman desde el primer año que vinieron les gustó el ambiente de oración y devoción hacia el Santo.
Texto y fotos: José Ángel García Gallego
