De auténtica trapisonda cabe calificar el vaivén de determinados ministros de Pedro Sánchez por las candidaturas con las que el PSOE concurrirá a las elecciones generales por las circunscripciones de Castilla y León. Los bandazos que viene dando Ferraz para colocar en las listas de esta comunidad a miembros del Ejecutivo ya en funciones están trayendo de cabeza a las direcciones del partido en varias provincias, muy especialmente a las de Valladolid, León y Ávila.
En Valladolid, después de haberse dado por hecho que la ministra de Industria, la vallisoletana Reyes Maroto, encabezaría la lista al Congreso, la ejecutiva provincial se ha visto obligada a dar marcha atrás para recomponer la propuesta que ya tenía cerrada. El motivo ha sido que Ferraz ha buscado hueco a Maroto en la lista por Madrid, ello con el fin de satisfacer el deseo del ex secretario provincial del PSOE, Javier Izquierdo, de encabezar la candidatura vallisoletana..
Izquierdo, actual secretario general de Infraestructuras del ministerio de Fomento, cargo al que saltó desde la presidencia del grupo parlamentario socialista de las Cortes, no es cualquiera. Amén de formar parte de la actual Ejecutiva Federal del partido, de la que es responsable de Formación, en su momento fue, junto a José Luis Abalos, el único secretario provincial del PSOE que se mojó públicamente en favor de Sánchez en su confrontación con Susana Díaz (las secretarias de Burgos y Zamora, Esther Peña y Mar Rominguera, también estaban del lado del resucitado, pero en ningún momento lo explicitaron). Y ha sido Abalos, quien, amén de su jefe en el ministerio, es el secretario federal de Organización del partido, el que ha reubicado a Maroto para que Izquierdo sea el que suceda en la lista vallisoletana a la susanista-rubalcabista-zapaterista-felipista Soraya Rodriguez.
La trapisonda ha sido aún mayor en Ávila y León. Cuando ya parecía estar colocada en su provincia de nacimiento, la ministra de Defensa,Margarita Robles, ha saltado repentinamente de la lista por León a la de Ávila, donde ya se daba por segura la presencia de su compañero de Interior, Fernando Grande Marlaska. Y ello no ha sido para respetar la jerarquía orgánica del secretario de los socialistas leoneses, Javier Alfonso Cendón, que aspiraba a encabezar la candidatura al Congreso. Ferraz no ha amparado a Cendón, que llegó al cargo derrotando -gracias al apoyo de Zapatero, que nunca ha dejado de enredar en el PSOE de León- al candidato sanchista, sino que ha reenviado a Robles a Ávila en beneficio de otro sanchista pata negra, cual es el secretario de Cultura y Deportes de la Ejecutiva Federal y presidente ejecutivo de Acción Cultural Española, Ibán García del Blanco.
La ficha de dominó pendiente de colocar ahora es el ministro del Interior, que vamos a ver si no acaba recalando en Segovia, donde “El topillo” no ve del todo firme el número uno al Congreso asignado provisionalmente al secretario provincial y procurador de las Cortes, José Luis Aceves. De aquí al fin de semana, en que está previsto que la dirección federal proclame las listas definitivas, todavía puede continuar la trapisonda.
P.D.- Hablando del Ejecutivo que preside Pedro Sánchez, la consejera de Hacienda (por la mañana) y candidata del PP a la alcaldía de Valladolid (por la tarde), Pilar del Olmo, lo calificó ayer de “gobierno zombi” (sic). ¿De qué me suena a mí eso de “gobierno zombi”? Poco más y ya puesta, le faltó referirse a Sánchez como un presidente “pato cojo”. Es que me troncho y me parto. O me parto y me troncho, como prefieran.