Francisco Igea, líder de Ciudadanos en Junta de Castilla y León, afirmó este martes que no abandona ni se plantea dejar su formación, que calificó de un partido «valiente», y defendió que se realice una oferta a Pedro Sánchez para una posible abstención en la investidura del socialista.
ICAL. Francisco Igea, instó este martes al presidente del PPCyL, Alfonso Fernández Mañueco, a que tome una decisión sobre su propuesta de un Gobierno conjunto, que genere ilusión, que no sea de continuidad y que «no pague cuotas», porque «el tiempo se agota».
Igea ofreció una rueda de prensa en la sede de Ciudadanos en Valladolid para explicar por qué fue uno de los cuatro miembros del partido que votó en contra de mantener el veto a negociar con Pedro Sánchez y en la que explicó cómo están las negociaciones con el PP, donde anunció que este martes se reunirá con Alfonso Fernández Mañueco para pedirle una respuesta.
El líder de Ciudadanos manifestó que no se trata de un «ultimatum» pero reiteró que el «tiempo se agota» y se tiene que decidir si acepta un Gobierno paritario, que genere sobre «todo ilusión», y que no sea exclusivo del Partido Popular, en el que afirmó que puede estar él o no, ya que hoy se ha presentado el escrito de la creación del Grupo en las Cortes en el que figura como portavoz.
«Ciudadanos hace lo que decía que iba a hacer, trabajar para elaborar un programa conjunto con el Partido Popular», conforme a lo marcado por la dirección nacional de su partido de quien es el socio preferente, si bien recalcó que «ahora se está pendiente de saber» si los ‘populares’ han entendido que no «es el tiempo» de un Gobierno solo de este partido.
En ese marco, después de suscribir el pasado viernes las 100 medidas de gobierno, explicó que se reunirá con Fernández Mañueco para instarle a que tome una decisión y emplazó a que opte por «si piensa en sus propios cargos o en un Gobierno que genere ilusión».
Reconoció el líder naranja que Fernández Mañueco, de quien dijo en la campaña electoral que no representa el cambio y que ha sido consejero de casi todo excepto de «Marina», no es su «candidato ideal», pero añadió que es una decisión del Partido Popular y que «alguien» tiene que presidir la Junta, que consideró «normal» que sea de la formación con más votos.
«No he puesto condiciones personales», respondió cuando se le preguntó si ha planteado en la negociación que Fernández Mañueco no sea el candidato a la Junta sino otra persona de su partido, para insistir en que se trata de configurar un Gobierno paritario, con los mejores en sus puestos, con un sistema igualitario en la toma de decisiones y en la «voz» de ese Ejecutivo.
30 años a la espera
Igea, que reiteró que no ha decidido entrar en ese Gobierno, defendió que «echar a andar la legislatura es importante», si bien manifestó que el «momento culminante» será cuando se tengan que aprobar los presupuestos autonómicos o hablar de financiación autonómica, entre otras cuestiones.
El líder naranja defendió las cien medidas acordadas con el PP de la critica realizada por la vicesecretaria general del PSCyL, Virginia Barcones, que las descalificó como «más de lo mismo», para asegurar que no conoce propuestas concretas de esta formación, ganadora de las elecciones, ni tuvo respuesta cuando él planteó 17 puntos sobre sanidad.
«El PSOE está instalado en la descalificación, lleva 30 años sentado esperando que caíga algo, no sé cuál es su oferta», valoró Igea, que añadió que mantendrán «la mano tendida para hablar de todo» con las fuerzas parlamentarias y recordó a Barcones que la lucha sobre la despoblación no está solo en un apartado, sino que las medidas para reducir impuestos o desgravacciones en municipios de menos de 5.000 habitantes van en esa dirección.
No abandona Cs
Francisco Igea afirmó que no abandona ni se plantea dejar su formación, que calificó de un partido “valiente”, y defendió que se realice una oferta de programa a Pedro Sánchez para una posible abstención en la investidura del socialista.
Igea explicó por qué ayer fue uno de los cuatro miembros de su partido que votó en contra de mantener el veto a negociar con Pedro Sánchez, en la que defendió la figura de Toni Roldán, que dejó su escaño y al que puso como ejemplo. “¿Hay algún Toni Roldán o Javier Nart en el PSOE?”, se preguntó.
En una exhaustiva explicación inicial de por qué no abandona el partido, que consideró el “instrumento más eficaz” porque la critica es “posible y levantarse para decir lo que piensa”, sostuvo que “la adolescencia es la crisis necesaria para crecer”, ante las diferencias surgidas que han llevado a salidas de dirigentes por el giro hacia la derecha, y subrayó que estar en el centro “te arrean por los dos lados”.
Al respecto, rechazó la política de “trinchera” y lamentó que en España se haya dejado de discutir de políticas públicas y de medidas que interesan a los ciudadanos para centrar el discurso en la “descalificación, el insulto y el despreció” al contrario. “Dialogar no es rendirse, pactar no es traicionar”, sentenció, para recordar la frase de Miguel de Unamuno de que “vencereis pero no convencereis”.
“Veo el mismo mensaje en los que se pasean con antorchas por Vic que en los que hacen del novio de la muerte su himno”, argumentó para dirigirse a los militantes para que estén “orgullosos” de un partido como Ciudadanos que “se pasea por todas las partes, desde Alsasua hasta Béjar con el mismo mensaje”.
En ese marco, defendió que Ciudadanos realice una oferta prográmatica para “desenmascarar” a Pedro Sánchez, donde se mostró después confiado en que se pudiera llegar a la abstención en la investidura, aunque ante el “dilema” de pactos del presidente en funciones también calificó de “irresponsable que la carga de la prueba” se ponga en su partido.
“Nadie en el PSOE se ha levantado” para decir que no se pacte con EH-Bildu en Navarra o en defensa de la igualdad en todo el territorio, argumentó en referencia a la aseveración de José Luis Ábalos de “cuántos Valls, Roldán o Nart hacen falta en Ciudadanos para que recapacite”. “¿Acaso hay un Toni Roldán en el PSOE. No hay ninguno?”, se respondió.