Nueva polémica a la vista a raíz de la calificación de un ataque de una manada a una chica que tenía 14 años cuando abusaron de ella por turnos aprovechando que estaba drogada y borracha.
Los hechos ocurrieron en 2016 cuando la víctima acudió a un botellón organizado en una fábrica abandonada a las afueras de Manresa (Barcelona).
Ella bebió en exceso y consumo estupefacientes algo de lo que se aprovechó uno de los seis procesados para llevarla a una caseta para abusar de ella.
Al salir se lo contó al resto de sus amigos y uno por uno fueron haciendo lo mismo, en turnos de 15 minutos. Otro solo miró y se masturbó, pero también lo procesan por no impedir la agresión del resto.
El fiscal califica la acción de los seis que consumaron el coito de abusos sexuales, por lo que solicita para cada uno de ellos penas de entre 10 y 12 años de prisión. La acusación particular afirma que no fueron abusos sino agresiones (equiparable a lo que antes se calificaba como violación) por lo que solicita penas de entre 15 y 20 años de cárcel para cada uno delos seis de la manada.
Este miércoles han declarado los procesados, y cada uno ofreció evasivas a su medida y versiones contradictorias.