El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, atribuyó este jueves a una “clara deficiencia” en los sistemas de información de la Consejería de Sanidad la situación de las listas de espera quirúrgicas, de pruebas diagnósticas y de consultas de especialistas.
En la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno de la Junta, Francisco Igea negó que hasta el momento hayan detectado instrucciones sobre los profesionales sanitarios para que no incluyeran a determinados pacientes en las listas estructurales, que recogen a los usuarios que están pendiente de entrar en quirófano, acudir a una consulta o someterse a una prueba diagnóstica.
De momento, Igea recordó que solo se han reunido con el gerente del Hospital de Salamanca y señaló que mañana la titular de Sanidad, Verónica Casado, lo hará con los responsables de Burgos. Las reuniones, avanzó el vicepresidente, continuarán “a partir” de esta semana con el resto de directivos de centros hospitalarios de la Comunidad, con el objetivo de mantener encuentro con todos ellos.
Asimismo, el portavoz de la Junta reiteró que los registros de pacientes en espera no reflejan “adecuadamente” los datos, según los cuales 8.928 pacientes no figuraban en la lista de espera estructural para operarse, sino como enfermos que rechazaban de forma voluntaria o por cuestiones clínicas pasar por quirófano, por lo que la cifra total al cierre de junio se sitúa en 31.074, con una espera media de 80 días. De la misma forma, la lista de espera de consultas es de 179.014 y no de 118.419 pacientes, como figuraba en la lista estructural, con una demora media de 122 días.
En ese sentido, el vicepresidente remarcó que a partir de ahora se publicarán los datos de todas las listas de espera, por lo que se podrá conocer cómo evolucionan y la situación “real” y “exacta”, algo que destacó no ocurre en otras comunidades. Además de este “esfuerzo”, aseguró que también se difundirán otros a lo largo de este mandato para conocer índice de eficiencia y rendimiento, a través de indicadores como las actuaciones por facultativos, o los índices de complicaciones, reingresos, mortalidad o infecciones.
Esto, dijo Igea, “no ha hecho más que empezar” y señaló que tanto los profesionales y los ciudadanos podrán conocer un mayor número de datos sobre el sistema sanitario de Castilla y León.
También invitó a los grupos de la oposición que recibieron con “escándalo” los datos de las listas de espera el pasado jueves que “despierten” de su “letargo”. Recordó que ya se publicaron en 2016 a petición de Ciudadanos, así como en el caso del Complejo Asistencial de Salamanca. “No entendemos bien la sorpresa”, dijo Igea, quien consideró que no se han enterado de cómo se conforman los registros de pacientes.
Gastos y desviación
“En ello estamos”, afirmó sobre la búsqueda de una solución a la desviación prevista de 808 millones de euros en el gasto de la Consejería de Sanidad este año en relación a los Presupuestos Generales de la Comunidad, de 2018, que se encuentran prorrogados. Aseguró que trabajan ya con la Consejería de Economía y Hacienda para encontrar la fórmula que permite hacer a esta situación financiera.
También aseguró que “en principio” los ministerios de Hacienda y Sanidad no han requerido a Castilla y León que acometa un plan de ajuste y control sobre el gasto farmacéutico, como han hecho con once autonomías españolas, entre ellas Cataluña. Igea indicó que no es necesario que lo soliciten porque es una tarea que debe llevar a cabo “cualquier gobierno sensato”.
Explicó que el gasto farmacéutico, en especial el hospitalario, ha crecido en los últimos años de forma diferente a cómo lo ha hecho el “ambulatorio”. Por tanto, recalcó que es una “obligación” extremar el control y la eficacia sobre la factura de la farmacia.
Falta de especialistas
Por otra parte, el vicepresidente de la Junta reconoció que la falta de especialistas en la Comunidad “no se arregla de la noche a la mañana”, con un decreto o una ley. Recalcó que esto es una tarea que se tiene que llevar a cabo con diferentes medidas y cambios, como el incremento adoptado sobre la oferta de formación sanitaria especializada, que crecerá en la convocatoria de 2019-2020 más de un 26 por ciento, con 576 nuevas en la Comunidad.
También apostó por un nuevo sistema de provisión de plazas, tras la salida de España de unos 14.000 o 15.000 especialistas en los últimos cuatro o cinco años. Por último, admitió que las mayores dificultades se encuentran en hospitales periféricos como los de Aranda de Duero (Burgos) y Ponferrada (León).