El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, señaló este jueves que “no habrá impunidad” para aquellas personas que cometen hechos delictivos y elevó a 97 el número de detenidos desde el lunes por los “hechos vandálicos” que se desarrollan en las calles de Cataluña desde que se conoció la sentencia del Tribunal Supremo por el ‘procès’.
Solo en la última noche, dijo, fueron arrestadas 46 personas. Del centenar total de detenidos, cuatro de ellos están en prisión preventiva por desórdenes públicos, hechos vandálicos y por delitos de atentado contra los agentes de la autoridad
En una rueda de prensa en Moncloa, el titular de Interior informó de la reunión del Comité de Seguimiento que presidió Pedro Sánchez para analizar la situación en Cataluña, antes de su partida a Bruselas para participar en la reunión de jefes de estado y de gobierno de la Unión Europea.
Grande-Marlaska señaló que “ninguna actuación delictiva criminal va a quedar impune» y añadió que tampoco quedarán exentos de responder ante la ley «los responsables e inductores participes de cualquier tipo» de la actuación criminal «relacionada con el conjunto de hechos que se están verificando estos días y que han podido ser previamente organizados para tener esa coordinación. “No les quepa ninguna duda, que quede claro, que se seguirá deteniendo a quienes tengan conductas delictivas, porque no hay, no habrá impunidad”, reiteró.
Pero acto seguido Marlaska se agarró a que, “para que la investigación tenga el éxito necesario y preciso, la cautela debe ser máxima en estos términos”. Además pidió al presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, que condene de “forma expresa e indubitada la violencia” de las últimas jornadas en Cataluña y no como hizo ayer, “a última hora y de forma arrastrada”. También le exigió que tenga un “recuerdo” y “reconocimiento” para los agentes policiales de los Mossos, Policía Nacional y Guardia Civil que están “garantizando la seguridad”.
“Nos guiamos por hechos, no por declaraciones” porque estas pueden ser “interpretables”, señaló el ministro cuando se le preguntó si las últimas palabras de Torra merecen que se pida su dimisión o actuar contra él. Aunque señaló que eso “no quiere decir que no las valoremos”.
Para el titular de Interior ha llegado el momento de que Torra «decida de una vez si quiere ser el presidente, el más alto representante del Estado en la comunidad autónoma de Cataluña, o quiere ser un activista”.
Actos vandálicos
«Dentro de la ley cabe todo y fuera de la ley creo que ya tiene un conocimiento expreso de lo que acontece en un Estado de Derecho”, avisó en clara referencia a las condenas a años de prisión de los políticos independentistas. «Deseamos, esperamos también por información, que los hechos vandálicos disminuyan», expresó el ministro, dejando claro que las fuerzas policiales están funcionando de manera “coordinada” y los ciudadanos verán que «participar en actos vandálicos no es impune». Además, trasladó como apunte que “ayer miércoles se produjeron 190 incendios de contenedores; el martes, antes de ayer, fueron 250”.
“El daño, no solo es material, sino también reputacional a la imagen internacional de Cataluña y tiene unos responsables que lo han alentado”, comentó Marlaska. A su juicio, la «actuación policial» sumada a la «conducta activa de la sociedad catalana» conllevarán una rebaja de la tensión en las calles, donde han resultado heridos ya 194 agentes (entre Mossos y Cuerpo Nacional de Polícia) por la “gran violencia” en Cataluña por “grupos minoritarios pero perfectamente organizados”.
Por último, a la espera de una evaluación exhaustiva de daños provocados tanto en mobiliario urbano como en infraestructuras públicas, comentó que durante la jornada del martes en Barcelona se produjeron daños por un importe de 627.000 euros.
Respecto a la información de ‘Okdiario’ sobre su cena anoche en un restaurante mientras se producían disturbios en Cataluña y la petición de dimisión por parte de la oposición por este asunto, el ministro reflexionó que “todos los políticos por nuestra actuación nos retratamos, pero todas las personas se retratan por su actuación profesional cada una en su cuestión”.
“Este ministro, como todo su equipo trabaja las 24 horas, y no va, desde luego en ningún momento a ningún sitio relajadamente cuando está trabajando. Lo que sí hace es cenar, muy brevemente, y no con terceras personas, sino trabajando y con una persona de su gabinete, de modo que seguía hablando de trabajo y coordinando la actividad para el día siguiente, es decir sin solución de continuidad de la jornada laboral”, concluyó.