El rey Felipe VI, a través de la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, ha propuesto este miércoles al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, como candidato a la presidencia del Gobierno.
Sánchez aceptó el encargo, a pesar de que aún no cuenta con apoyos suficientes para salir elegido porque el apoyo de ERC no parece tan claro.
El presidente en funciones anunció que el lunes se reunirá con el presidente del PP, Pablo Casado, y la líder in péctore de Cs, Inés Arrimadas, y que en los próximos días llamará a todos los presidentes autonómicos, entre los que está Torra.
La presidenta del Congreso compareció para anunciar la propuesta, tras mantener una reunión con el rey, Felipe VI, en el Palacio de la Zarzuela. Felipe VI le ha comunicado su propuesta tras la ronda de consultas celebrada entre el 10 y 11 de diciembre con los representantes políticos de la XIV Legislatura que obtuvieron representación parlamentaria en las pasadas elecciones generales del 10 de noviembre.
Una vez formulada la propuesta para la presidencia del Gobierno, la presidenta del Congreso de los Diputados fijará la fecha para celebrar la sesión de investidura, en la que el Pleno decidirá si otorga su confianza al candidato propuesto por el rey. En caso de no otorgar esta confianza, el rey volvería a presentar otra candidatura por el mismo procedimiento.
Si pasados dos meses desde la primera votación, ninguno de los dos candidatos propuestos lograra la confianza de la Cámara, se tendrían que convocar nuevas elecciones. En este caso, sería la presidenta del Congreso el que sometiera a la firma del Rey el Decreto de disolución de las Cortes Generales y de convocatoria de elecciones generales.