Las cada vez más crecientes dificultades que se está encontrando Berkeley para levantar las prohibiciones a su proyecto para abrir una mina de uranio en Retortillo se suman en este fin de año los malos augurios de los mercados para el valor de las acciones de la compañía de cara a 2020.
En diciembre de 2018 el Ayuntamiento de Retortillo denegó la licencia urbanística solicitada por Berkeley para la mina de uranio. A este ayuntamiento no le quedó otra salida tras el informe emitido por el Servicio Jurídico de Asistencia a Municipios de la Diputación provincial de Salamanca que concluía que no se podía dar esa licencia ya que las obras previstas afectaban a una carretera, la SA-322, que no se había desdoblado como está previsto. El proyecto presentado también carecía del visado correspondiente.
Berkeley recurrió al Contencioso esa denegación, incluyendo como demandados al ayuntamiento de Retortillo, el ayuntamiento de Villavieja de Yeltes y la Plataforma Stop Uranio. Villavieja solicitó que se suspendiera este procedimiento hasta que no se resuelva el de la autorización de uso presentado por Stop Uranio en 2017 y que se encuentra pendiente de resolución. En diciembre de 2019 la jueza de lo Contencioso número 2 de Salamanca le da la razón a Villavieja en contra de lo argumentado por la empresa minera que necesita con urgencia ese permiso para intentar actuar sobre el terreno.
Con esta resolución la empresa Berkeley no puede iniciar ningún movimiento de tierras hasta que no se resuelvan estos dos procedimientos judiciales, «por lo que a pesar de los anuncios reiterados de la empresa de la próxima apertura de la mina esa situación está lejos de producirse», según afirma la plataforma.
Stop Uranio recuerda que Berkeley sigue cotizando en la Bolsa, con continuas subidas y bajadas que poco tienen que ver con la realidad de la situación de los distintos permisos que necesita la empresa para actuar en Retortillo. «Nos encontramos ante un caso flagrante de especulación minera como ha sido denunciado por Ecologistas en Acción en el informe recientemente emitido sobre este tipo de proyectos. Estos movimientos especulativos estarán beneficiando a determinadas personas, pero quienes han sufrido las consecuencias han sido las casi 2000 encinas centenarias arrancadas por el capricho de una empresa ante la pasividad de las distintas administraciones implicadas», indica la plataforma.
Los mercados ya tienen considerado este valor como muy volátil, con subidas explosivas y caídas igualmente bruscas, sin consistencia y de alto riesgo.
Movimientos espasmódicos como el que se produjo tras las elecciones municipales de mayo, en las que el PP logró la victoria en el municipio obteniendo cuatro delos cinco concejales en liza, lo que más le convenía a Berkeley, sobre el papel. Meses después llegó el varapalo judicial que deja la labro del Ayuntamiento paralizada hasta que se resuelva el recurso sobre la autorización de uso a la empresa minera.
Un reciente informe de bolsayeconomía.com advierte precisamente de estas circunstancias y de la inestabilidad del valor, por lo que pide tener «mucho cuidado» con las acciones de Berkeley.
La acción acumula una caída «importante» en el tramo final del año y su tendencia «seguirá siendo bajista» y concluye que «la prudencia tiene que ser extrema sobre las acciones de Berkeley en la bolsa española».
