El conductor de ambulancias de la provincia asegura que hay casos en toda Salamanca y que la situación es muy complicada. “Sabemos que hay residencias infectadas y a partir de ochenta años no se llevan al hospital. Es muy duro, pero lo han decidido así”.
¿Estáis desbordados?
Nosotros en la provincia, lo llevamos. Estamos teniendo una media de tres o cuatro avisos al día. Aunque son avisos que tardas el doble, porque te tienes que poner el buzo, que es superincómodo, mascarilla, guantes,… hasta que llegas allí, dejas el paciente, pasas a descontaminarte, te quitas el traje,… te lleva el doble de tiempo.
¿Tenéis material?
Justito. Las mascarillas las tenemos que reutilizar, con lo que supone. Los compañeros de Salamanca están peor, tienen que hacer tres avisos con la misma mascarilla y eso es un riesgo. En nuestro caso, nos descontaminamos el traje y también lo reutilizamos.
¿Sabéis en todo momento si el paciente que lleváis tiene coronavirus?
No siempre. Hemos tenido un caso, un paciente con infección y en ningún momento se nos dijo. Eso es denunciable.
¿Qué ocurre con los pacientes que no son de coronavirus?
Los pacientes están esperando hasta doce horas. Está suspendido casi todo, salvo diálisis y tratamientos oncológicos. No estamos teniendo casi avisos y los que tenemos son pacientes con problemas respiratorios. La gente está aguantándose en casa.
¿Hay ambulancias?
En la provincia andamos bien. Eso sí, con más de ochenta años y con coronavirus no va, con otras patologías sí, pero con coronavirus no.
¿En todos los casos?
He llevado a una persona de 83 años con un cuadro de vómitos y diarrea, en principio son síntomas de coronavirus, pero no lo tenía diagnosticado, porque si no con más de 80 años, no habría ido al hospital.