Las empresas podrán solicitar ayudas para financiar la adquisición de equipos de protección individual en Castilla y León. La cuantía será del 80 por ciento respecto del gasto subvencionable, pero no podrá superar en ningún caso los 2.000 euros por beneficiario.
Así lo establece una orden publicada este jueves en el Bocyl, que establece las bases reguladoras para la concesión de subvenciones públicas dirigidas a la adquisición de epis frente a riesgos biológicos, a la asistencia externa para labores de desinfección de los recursos, instalaciones y personas, exclusivamente en respuesta a la situación de contingencia y la asistencia de un servicio de prevención ajeno para la evaluación de los puestos de trabajo que puedan ser población de riesgo frente al Covid-19.
Podrán ser beneficiarios las personas, físicas o jurídicas, privadas con ánimo de lucro, agrupaciones de ambas, comunidades de bienes o cualquier otro tipo de unidad económica o patrimonio separado que aunque carezcan de personalidad jurídica lleven a cabo las acciones objeto de la subvención.
En todo caso deberán cumplir un requisito imprescindible: que su volumen de negocios anual no supere los 50 millones de euros o su balance general anual se encuentre por encima de los 43 millones.