Me parece indignante que el Ayuntamiento de Salamanca me pase la factura por el trabajo que los Bomberos realizaron en mi casa el día 25 de abril. Tenía que ser al contrario, se la deberíamos pasar nosotros por el daño que nos han hecho”. Así de contundente se muestra un vecino de la calle Arroyo de Santo Domingo que ha recibido una factura de 400€ por los servicios prestados por los bomberos para sacar el agua de su cochera el 25 de abril a consecuencia de una tormenta y de la inundación de la calle.
El agua que achicaron los bomberos se acumuló en su garaje por una gran tormenta que abnegó la calle, inundando la Casa de los Niños del Coro, residencia oficial del obispo de Salamanca, y el hotel San Polo, además de otras viviendas particulares. El Ayuntamiento ha reconocido que esta calle tiene un problema para desaguar cuando se producen trompas de agua. De hecho, está licitada la obra para su arreglo.
“Nos ha extrañado lo rápido que han sido en pasarnos la factura. La tormenta se produjo hace unos veinte días y ya tenemos en casa el recibí. Aparentemente, en este estado de alerta lo tienen paralizado todo, al menos los servicios, pero pasarnos la factura y mandarla a casa, inmediatamente”, protesta el vecino de la calle Arroyo de Santo Domingo.
Está indignado y para “curarse en salud” lo primero que ha hecho ha sido llamar a su seguro, al que había comunicado los gastos que había tenido para adecentar su local debido a la inundación. “Casi, nada más colgar con el seguro, me llega el recibo de 400€ del Ayuntamiento. Le he preguntado a mi seguro a quién le corresponde pagarlo y me han contestado que lo pagará el consorcio. Estos me han pedido que le envíe la factura correspondiente”.
El vecino se pregunta si al obispo y al hotel también le han enviado la factura. “Es una vergüenza que automáticamente al ciudadano le pasen una factura por la intervención de los bomberos como consecuencia de una inundación producida porque las tuberías están mal diseñadas. Mi inundación la han provocado ellos, porque si los saneamientos o los desagües estuvieran correctamente o en condiciones, no se inundarían nuestras casas”.
Según el vecino, desde el Ayuntamiento son muy eficaces en “pasar la factura para que el ciudadano la pague. En cambio, hace unos años, por las mismas circunstancias, le reclamé los gasto que me había originado la rotura de una tubería en la calle y estoy esperando que me lo paguen. Vinieron los técnicos y lo que me dijeron es que tenía que tener una bomba para achicar el agua. Se pasaban la pelota y no saqué nada en claro. El Ayuntamiento no se puede aprovechar del consorcio de seguros y pasarle la factura de un problema suyo».
Cada vez que llueve, los vecinos de Arroyo de Santo Domingo rezan para que no se inunden su calle. “Llevamos cinco días limpiando, tardaremos meses en sanear todo el local, no podemos tirar los escombros y deshechos. Tenemos toda la casa empantanada y llega el Ayuntamiento y lo único que se le ocurre es pasarte el recibo. El comportamiento del Ayuntamiento es una inmoralidad”, concluye.