No corren buenos tiempos para Salamanca, ni mucho menos. Al hecho de ser una de las provincias de España donde más daño ha hecho la Covid-19 por su elevado índice de envejecimiento, hay que sumarle que se ha dejado por el camino la friolera de 1.186 habitantes por el camino en el último año.
Al menos eso es lo que se desprende de los últimos datos hechos públicos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el padrón, que revelan que la provincia ha vuelto a sufrir una ‘estocada’ poblacional antes de la aparición del coronavirus y su letalidad.
No en vano, la población de Salamanca a fecha enero de 2020 ha caído hasta los 331.048 habitantes, 1.186 menos que los 332.234 que estaban registrados un año antes, en enero del año 2019, lo que supone una pérdida de 98 habitantes al mes o la friolera de 3,3 cada día durante los últimos 365.
Analizando un poco más los datos en comparación con años anteriores, la criba es aún mayor; tomando como referencia la población total de la provincia en el año 2010, el dato es demoledor. Salamanca ha pasado de 350.901 ciudadanos en esa fecha a los 331.048 actuales, cifra que supone un descenso de 19.853 habitantes, con una pérdida de 165 cada mes o de 5,5 cada día durante la última década.
Por nacionalidades, 315.411 ciudadanos son españoles, 5.160 de países de la Unión Europea (sin contar España) y 849 provienen del continente africano. En el caso de América, la provincia cuenta con 6.486 ciudadanos, de los que 4.297 tienen nacionalidad sudamericana.