El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, recordó este lunes al sector de la hostelería, tras las quejas mostradas ante la decisión de la Junta de Castilla y León de limitar la movilidad nocturna entre las 22.00 y las 6.00 horas, que “las autoridades competentes deben tomar las decisiones en función de las circunstancias sanitarias”.
Ical/LCS.- . “A partir de ahí, todo es opinable”, aceptó García Carbayo, quien entendió que las nuevas medidas del Ejecutivo autonómico, que restringen la movilidad una hora más que lo marcado inicialmente por el Gobierno de España, “pueden gustar más o menos, porque a determinados sectores les puede perjudicar”, aunque aclaró que en el Ayuntamiento de Salamanca no recibieron “solicitudes como tales” de organizaciones de hosteleros para tratar de cambiar el horario impuesto por la Junta de Castilla y León.
El alcalde desautoriza así a su concejal de hostelería, Fernando Castaño, que la semana pasada criticó las medidas que perjudican al sector, como lleva haciendo toda la pandemia sin que nadie le salga al paso.
Ahora acaba de ser desautorizado pro el alcalde, pero da lo mismo, porque no tienen consecuencias. Se necesitan mutuamente. El alcalde lo tiene contratado junto a otros dos ediles de Cs para completar la mayoría absoluta necesaria para pasar otra legislatura apacible, y los tres contratados no pueden prescindir de los más de 60.000 euros anuales que se llevan a la buchaca.
Sí reconoció el alcalde de Salamanca que dispone de información sobre “ciertas iniciativas y molestias del sector” por una cuestión, “decidir la hora” de la limitación de movilidad nocturna, que como recordó García Carbayo “corresponde evaluar y decidir a las Comunidades Autónomas, en función de sus circunstancias sanitarias”.
A ese respecto, el alcalde de Salamanca recordó, tal y como hizo el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, que “otras Comunidades Autónomas han prohibido por completo la actividad hostelera” y que en otros lugares “se han establecido horarios con restricciones más estrictas que en Castilla y León”.
