La Plataforma Plan de Choque Social de Castilla y León celebró este sábado una concentración en la Plaza de la Concordia para reclamar a las instituciones una defensa de los servicios públicos y que a clase trabajadora “no vuelva a pagar la crisis, en este caso la generada por la Covid-19”.
La Plataforma reclama la defensa de los servicios públicos, un ingreso “incondicional y suficiente para todas las personas”; una salida a la crisis “con justicia social y ecológica”; vivienda “por derecho” que permita “rescatar personas, no capital; y por unas pensiones “dignas” para todas las personas, con un mínimo de 1.084 euros y blindadas en la Constitución.
Esta concentración, que se ha repetido en varias ciudades españolas, es un intento de «construir una respuesta de la clase trabajadora y la mayoría social, ante el rumbo que están tomando los acontecimientos con motivo de la pandemia por el coronavirus y de la crisis económica y social consecuente”.
A su juicio, “una vez más, los poderes económicos y mediáticos, con sus tentáculos en las distintas instituciones y gobiernos, están consolidando su hoja de ruta para volver a salir indemnes de esta situación y hacer recaer todo el peso de las consecuencias económicas y sociales sobre la clase trabajadora y las personas más desfavorecidas, poniendo en primera línea de las prioridades sacar oportunidad de la crisis, obviando cualquier criterio de justicia social y medioambiental y condenando a millones de personas al sufrimiento”.
En este sentido, los convocantes denuncian que las grandes empresas “han seguido lucrándose pese a anunciar a bombo y platillo las pérdidas que podían suponer las restricciones”.
Para ello, “no han dudado en parasitar lo público sin rubor para nutrir sus beneficios a costa del sufrimiento de los trabajadores. Tampoco les ha temblado el pulso a la hora de posicionarse los primeros en la fila para recibir los fondos públicos. Mientras, la patronal y los poderes económicos se reúnen en foros y seminarios con el objetivo de articular e imponer a los gobiernos los criterios políticos para que, una vez más el peso de las consecuencias de la pandemia recaiga sobre nosotros”, critican.