[dropcap]J[/dropcap]esús Málaga lo ha vuelto a hacer: Presentar el segundo volumen de la trilogía que prepara sobre la Salamanca y sus gentes a lo largo del siglo XX. Cien años que si para el mundo fueron cruciales, no menos para Salamanca. Una ciudad que pasó de tener 27.000 habitantes a finales del XIX a superar ampliamente de los 150.000 un siglo después.
Durante dos años, Jesús Málaga, el que está considerado como el mejor alcalde de Salamanca en Democracia, ha estado entretenido yendo y viniendo de archivo en archivo y biblioteca en biblioteca. «Mi agradecimiento infinito, sin sus fondos y la competencia de sus responsables y trabajadores no hubiera sido posible este libro», explica el autor en la primera página del libro, después vendrán 900 de la historia más fascinante, vibrante y terrible que ha corrido por las calles, plazas, palacios, hoteles, casas, iglesias,… de esta Salamanca.
La vida cotidiana que nos trae Jesús Málaga es la que va desde 1924 a 1939 en Salamanca y su provincia. No hay hecho reseñable, ni personaje que anduviera por sus calles que no esté reflejado en este volumen, porque hay más de 3.000 nombres debidamente identificados que deambulan por su páginas y que han contribuido, de una u otra manera, a conformar la historia de esta ciudad de provincias que fue crucial en la Guerra Civil, al ser la capital militar del Gobierno rebelde que tuvo al general Franco como su lugarteniente.
Por sus páginas transcurre la vida. «A veces dan ganas de llorar, porque el sufrimiento de las gentes fue terrible». Así lo expresa Jesús Málaga.
Pero, también hay bodas entre tenores y señoritas de la tierra; amantes que eran reclamadas por dictadores, como fue la historia de Inés Luna Terrero y Primo de Rivera o despropósitos de jóvenes al concluir una boda y los efluvios del alcohol que hicieron estragos en la sociedad meapilas de Guijuelo en los albores de la II República.
Pero sobre todo, el libro que Jesús Málaga pone en las manos de sus lectores es la implicación tan desbordada que tuvo Salamanca y sus vecinos durante la Guerra Civil española. Tanto es así, que el libro incluye un mapa de los lugares que fueron significativos durante la contienda en la capital charra.
Por supuesto, en este viaje a través del tiempo, Jesús Málaga no se olvida de la Universidad de Salamanca y siendo médico, como es, habla de la facultad de Medicina y el trabajo realizado por un colega suyo para mantenerla en Salamanca. Todo gracias a la construcción del Hospital Provincial.
Unamuno también camina a través de la pluma de Jesús Málaga en este sendero de los años más convulsos de una historia que, aunque mayores, todavía hay salmantinos que tuvieron el privilegio de vivir, sufrir y sentir.
Jesús Málaga ofrece a los salmantinos un relato de ‘La vida cotidiana en la Salamanca del siglo XX. 1924-1939’ y promete que para dentro de dos años, concluirá su trilogía llegando hasta 1975. Pero, ahora, tomen aire, porque lo necesitarán, para afligirse, reír, llorar o descubrir lo que sintieron nuestros familiares hace casi un siglo.
