Para muchos la gran tragedia de la pandemia ha sido quedarse sin las celebraciones de Navidad, debido a las restricciones sanitarias para evitar los contagios.
Para algunos, su principal reivindicación es poder tomarse unas cañas, aunque estemos casi bajo cero.
Y para otros su mayor preocupación diaria sigue siendo la de encontrar un sitio para dormir. Todavía hay sin techo durmiendo en los cajeros de Salamanca, aunque nos parezca mentira., y en plena pandemia, como estas dos personas en una cajero de Alfonso IX, en Garrido. ¿Para esto no hay vacuna?
1 comentario en «La otra cara de la vida y la Navidad»
Y por qué no cobrán el INGRESO MINIMO VITAL O LA RENTA DE LA CIUDADANIA. Alguien me lo puede explicar. Gracias