[dropcap]D[/dropcap]e vez en cuando, como el Guadiana, aparece la noticia de que Sara Carbonero e Íker Casillas hacen vidas por separado o están a punto de anunciar que ya no son pareja.
Su vida privada siempre ha sido eso, privada, de su vida personas conocemos que tienen dos hijos y sus idas y venidas de Portugal a España. Sobre su vida profesional, tanto Sara Carbonero, como el ex guardamente suelen ser muy generosos y hacen públicos los cambios.
En esta ocasión, quizá por aquello de que los rumores sobre un distanciamiento en la pareja tienen un altavoz muy potente en la televisión, Sara Carbonero ha compartido el libro que está leyendo, Ordesa, de Manuel Vilas, al que el suplemento cultural de El País, Babalia, definió como el libro del amor.
La periodista ha confesado que al principio le costó, «creo que por tocar de manera directa, valiente y detallada temas como la vulnerabilidad, la enfermedad o la muerte. Con el paso de los días, resultó que esa manera desgarradora de contar las cosas de Manuel Vilas, no solo no me incomodaba sino que me sentaba muy bien».
Sara Carbonero resume el libro como una carta de amor a sus padres, a los que el autor bautiza con nombre de célebres compositores porque, según sus propias palabras “tal vez el amor a nuestros muertos sea una simple canción que suena en nuestra cabeza”.
Sara confiesa que ha descubierto todo un laberinto de memorias desordenadas y caóticas. «Una historia delicada, sanadora y necesaria. Una reflexión sobre el pudor».
La periodista recurre también a la descripción que realizó Juan José Millás sobre Ordesa: «Es la carta del náufrago que esperábamos desde hacía años. «Como no se puede definir mejor, hago mía esta reseña, os animo a leerlo especialmente en estos tiempos de zozobra y agradezco la recomendación a uno de mis dealers literarios de los últimos tiempos».