Natalia González: “Cierro los ojos y pienso cada día que el Guijuelo sigue en Segunda B»

El fútbol siempre es una caja de sorpresas, y más en una categoría como la Segunda B, que se ha visto remodelada en el peor año posible por capricho de la RFEF.

El Guijuelo parece haber pagado la novatada en este temporada de la pandemia, atravesando mil y un problemas: lesiones, coronavirus, confinamiento, acumulación de partidos en poco tiempo… pero todo eso no puede esconder que las cosas se han hecho mal.

Los errores están ahí y cuando un equipo solo ha logrado 9 puntos en lo que va de campaña es por algo: Ante esta situación, la directora general del CD Guijuelo, Natalia González, hace un repaso de una temporada que, de momento, está siendo para olvidar.

Ahora, el equipo está en manos de su ‘hombre milagro’, un Chuchi Jorqués, que se ha ganado la confianza de todos en muy poco tiempo y que pase lo que pase, «se merece seguir», con un proyecto desde cero.

Marzo de 2021, ¿vives tu peor momento desde que llegaste al Guijuelo?

Sí, creo que sí; en los 10 años que llevo es la situación más complicada a la que me he tenido que enfrentar, también por la responsabilidad del puesto que tengo y porque asumo otras funciones diferentes a las de antes cuando estaba Jorge como presidente. Es cierto que hemos pasado malas temporadas, con malos momentos, pero ésta me ha marcado bastante por todo.

¿Por qué está yendo todo tan mal esta temporada?

El fútbol es, muchas veces, una lotería y probablemente con este equipo en otra temporada hubiésemos estado arriba y con un equipo de hace cinco años ahora mismo, también. O no… en el fútbol influyen muchos factores y realmente no sé decir por qué estamos donde estamos ahora. El club trabaja desde todos los departamentos más que otros años y se va profesionalizando más poco a poco. Al final, no sé una causa concreta.

Se puede decir que el equipo ha perdido una categoría porque ya no estará en la tercera categoría del fútbol española… ¿o no lo ves así?

No lo considero así, la verdad; habiendo creado una categoría nueva como la Pro, que no ha existido hasta ahora, no creo que se pierda una categoría. Creo que no hemos logrado ese ascenso, no que hayamos perdido una. Para mí, perder la categoría será si el equipo acaba descendiendo a Tercera; mientras tanto, el equipo luchará por seguir en la Segunda B real, que es la de toda la vida. No considero un descenso esto porque a la Federación se le haya ocurrido crear una nueva categoría.

¿Crees que es un fracaso no haber luchado al menos por la Pro?

Quizá confundimos los objetivos y han sido demasiado altos; es cierto que el grado de profesionalización del club podía dar para soñar con la Pro, pero no creo que sea un fracaso porque no hay que olvidar que somos el Guijuelo. Hay muchos equipos mejores que nosotros en muchos aspectos, especialmente el económico y pese a que fuimos con mucha ilusión, creo que nos hemos dado cuenta de que nos queda camino por recorrer.

¿Y el descenso a Tercera…?

En ese caso, está claro que sí; yo llevo diez años aquí y aunque ha habido veces que hemos estado al límite, conseguimos salvar la situación. Para mí sí sería un fracaso y creo que debemos aceptar los errores cometidos. Al final, si conservamos la categoría será porque lo hemos merecido y, si bajamos, también.

Pero, pese a todo… ¿eres optimista?

Sería plenamente optimista si dependiese solo de mí, pero hay 22 jugadores y cada uno es diferente al otro. Yo soy una persona muy positiva y creo que lo vamos a conseguir, de lo contrario, no estaría aquí. Eso sí, yo no puedo entrar en la cabeza de los jugadores para ver cómo pueden responder; pero que quede claro que confío en ellos 100%.

Después de 16 años en Segunda B, quince seguidos, ¿te imaginas al club en Tercera?

La verdad es que no puedo hablar sobre cómo sería, porque desde que llevo aquí el club ha estado en Segunda B; desconozco si en Tercera venía le gente al campo o si las empresas apoyaban igual; lo que sí tengo claro es que costará ver al equipo en Tercera, porque no es lo mismo jugar en una categoría nacional que no hacerlo.

Después de todo lo ocurrido, ¿te arrepientes de la decisión sobre Ángel Sánchez?

No, para nada. Al final, por el club han pasado muchos entrenadores y, por ejemplo, destaco a Rubén de la Barrera y Fernando Estévez… creo que no es bueno arrepentirse de lo que uno ha hecho y sí de lo que ha dejado de hacer. Por eso, pese a que le agradecemos mucho todo lo que hizo por el club, no me arrepiento de la decisión.

Llegaron Jacobo y Marcos Montes, ¿cómo valoras su labor en el Guijuelo?

Creo que han hecho un gran trabajo en el club, no se les puede reprochar nada, son profesionales y muy buena gente. Es cierto que en ocasiones quizá ha faltado un poco más de sangre o carácter, también en los entrenos; a veces, una voz no viene mal. Pero no tengo malas palabras para ellos… el fútbol es así y no han tenido tampoco la suerte que merecieron. Tomamos una decisión que no gusta, aunque era lo que teníamos que hacer.

Su destitución llegó en el peor momento posible; ¿pensasteis en hacerlo antes?

Somos un club muy conservador en ese apartado y con mucha paciencia; pensamos muy bien las cosas antes de hacerlas y no vamos a echar a un entrenador a las primeras de cambio, algo que hemos demostrado estos años. Además, el presupuesto del club no permite hacer muchas cosas; vemos que a otros equipos con más poderío económico no les tiembla el pulso para hacerlo cuando sea, pero nosotros no somos así. Cuando vimos que faltaba chispa y más cosas decidimos actuar.

Ante el momento crítico del equipo, ¿crees que la planificación deportiva ha sido buena?

No quiero ser ventajista con el club, pero tengo que valorarla de un modo muy positivo porque Astu trabaja a mi lado y sé lo que hace y por qué lo hace. Creo que el fútbol está siendo injusto ahora con él y todo ha ido en contra. Junto a Chema Aragón, es la persona más válida que ha ocupado este puesto.

Imagino que Astu también tendrá su cuota de responsabilidad en esta situación… ¿no?

Todos tenemos nuestra responsabilidad desde que se comenzó a construir la plantilla junto a los hermanos Montes. No vamos a esconder que tiene una alta responsabilidad porque es uno de los que hace los fichajes y el que tiene informes de jugadores para que vengan aquí a jugar. Un director deportivo tiene responsabilidad, pero no el 100% porque si tú ves a un jugador o tiene informes sobre él y luego no rinde ya no es una responsabilidad suya y sí del futbolista.

Pase lo que pase, ¿crees que merece seguir en su puesto?

Tiene contrato, con varias cláusulas y puede seguir, claro, siempre que la Junta Directiva lo considere oportuno. Incluso yo puedo estar en la cuerda floja si las cosas terminan mal.

Chuchi Jorqués ha sido el hombre elegido para obrar el milagro. ¿Por qué él?

Elegimos a Chuchi porque nos da las características que buscábamos. Ante todo es un entrenador con personalidad, buen profesional y que sabe transmitir la situación actual, necesitábamos que los jugadores creyeran en alguien como él. Es verdad que no tenía experiencia, pero con lo que ha vivido como jugador le vale para saber lo que tiene que hacer y que confiemos en él. Estamos muy contentos con su trabajo y aunque no ha podido entrenar muchas sesiones, está muy capacitado para sacar esto adelante y le ha cambiado la cara al equipo en imagen y conceptos pese a no haber obtenido buenos resultados.

Pase lo que pase, ¿confiáis en Chuchi para empezar un proyecto desde cero la próxima temporada?

Sí, claro, pase lo que pase. Si confiamos en él para este tramo de la competición es por algo; luego se verá si é quiere seguir y cómo termina todo. Pero, a día de hoy, creo que es la persona idónea para estar más tiempo en el club y empezar un proyecto; ésa es mi opinión personal.

Es obvio que se han hecho muchas cosas mal, pero ¿cómo es posible tener tan mala suerte o como lo quieras llamar?

Es cierto, y mira que yo no creo en la suerte, pero si la pelota no entra… Ha habido muchos factores que nos han perjudicado, aunque no es excusa; pero, si valoramos factor a factor, te llevas las manos a la cabeza. Malos resultados, lesiones, arbitrajes, coronavirus, confinamiento domiciliario, muchos partidos en muy poco tiempo… y un mes de enero muy difícil de gestionar. Parar, entrenar, parar, y así no se puede porque al jugador le afecta mucho. Ha habido muchas cosas, pero como dice nuestro ‘capitán del barco’ (Chuchi Jorqués) no son excusa.

Están apostando fuerte por la salvación fichando incluso a un psicólogo deportivo…

La situación de los jugadores ya no viene dada porque sean malos técnicamente, está claro; están muy afectados anímicamente y la cabeza lo es todo para un deportista. El cuerpo técnico y nosotros detectamos que podría venir bien esta figura para ayudarles a todos, aunque hay futbolistas a los que les hace más falta que a otros.

Imagina que cierras los ojos y los abres en mayo…

Cierro los ojos y pienso cada día que el Guijuelo está en esta categoría; mi único deseo es que el Guijuelo se quede en Segunda B.