La Junta de Castilla y León apoyó este miércoles el acuerdo de mínimos alcanzado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de cara a la festividad de San José y, de forma especial para la Semana Santa, y que para la Comunidad supone la continuidad del cierre perimetral ya actualmente en vigor, tanto para la entrada como la salida de personas, en el conjunto de la Comunidad, y también del toque de queda entre las diez de la noche y las seis de la mañana.
ICAL. En este ámbito, según informa la Junta en un comunicado, se resaltó la necesidad de una mayor vigilancia referida al cumplimiento de estas situaciones y de su sanción, en caso de incumplimientos.
En lo referido a la limitación de la permanencia de grupos personales en espacios públicos o privados, ésta se mantiene en un máximo de cuatro personas no convivientes en ambos ámbitos, aunque este número puede alcanzar los seis asistentes en terrazas, debiéndose cumplir en este contexto el resto de medidas preventivas vigentes indicadas para estos entornos hosteleros al aire libre. Asimismo también se ha acordado la no celebración de eventos masivos de cualquier índole que impliquen la aglomeración o concentración de personas.
La reunión de los representantes autonómicos y nacionales ha permitido, con el apoyo de la mayoría de las comunidades, establecer un régimen de medidas comunes en toda España, situación que venía siendo demandada con el fin de articular un marco único para el conjunto nacional.
La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, expresó en la reunión del Interterritorial en el apoyo de la Comunidad al contexto unitario, de manera que sea fácilmente conocible e interpretable por los ciudadanos, sin una excesiva complejidad normativa según regiones y con una vigencia inicialmente prevista hasta el 9 de abril, tras la finalización de la Semana Santa.
En cuanto al resto de medidas preventivas para hacer frente a la contención de la pandemia, desde la Junta se recuerda que Castilla y León mantiene el nivel 4 de alerta sanitaria y con él el régimen preventivo ordinario establecido a través del Acuerdo 76/2020 y sus posteriores actualizaciones.
En este sentido, el Consejo Interterritorial también ha hecho mención al compromiso de no bajar los correspondientes niveles de alerta sanitaria en que se encuentre cada comunidad autónoma, al menos, dos semanas antes del inicio de la Semana Santa; es decir, aun cuando los indicadores fuese favorable, con el fin de mantener las medidas en vigor o, aumentarlas, si así fuese necesario.