La tercera ola de la pandemia ha entrado en una fase de valle en Salamanca, con pequeños dientes de sierra de descensos y ascensos de los indicadores epidemiológicos, ante la dificultad para mantener el descenso de los contagios.
Salamanca notificó 31 contagios en las últimas 24 horas, frente a los 20 de la víspera, en una jornada en la que repuntaron la incidencia acumulada y la velocidad de circulación (transmisión) del coronavirus.
La incidencia, que mide el número de casos por cada 100.000 habitantes, se situó en 88 en los últimos catorce días (4 más que el miércoles) y en 40 casos a siete días (dos más que la jornada precedente).
Por su parte, el índice reproductivo que mide la velocidad de transmisión alcanzó las 0,83 personas contagiadas por cada infectado, que sigue por debajo de 1 (nivel a partir del cual empieza a ser preocupante), cinco centésimas más que el miércoles. Es poco, pero estos movimientos han rebotado levemente cuando se teme que podamos entrar en la cuarta ola.
La situación en el hospital mejoró algo, pero poco en la última jornada, con un paciente covid menos en planta (quedan 27) y sin cambios en la UCI (quedan 12 enfermos covid en la unidad de críticos del Clínico).