La pandemia ha acelerado una situación que no es nueva, ni mucho menos; la Plaza Mayor de Salamanca se vacía poco a poco…
Y es que, basta con dar un paseo por los soportales del ágora salmantina para observar cómo hay muchos (demasiados) locales comerciales cerrados.
En concreto, hasta un total de siete en un espacio no muy extenso y que es, sin lugar a dudas, el centro neurálgico de cualquier ciudad de España, también de la capital del Tormes.
La anterior crisis económica provocó que algunos locales tuviesen que cerrar sus puertas para siempre y ni los nuevos intentos han podido recuperar su lugar en el espacio más costoso de toda la ciudad, con rentas que no se pueden soportar, menos ahora.
A otros emprendedores se los ha llevado la pandemia por delante y la opción de poder acceder a uno de esos locales es, a día de hoy, una quimera, salvo sorpresa no anunciada por el momento.
Doce bares, tres locales del Ayuntamiento, cuatro joyerías, un Burger King, dos tahonas, una farmacia, una pensión, un estanco, una agencia de viajes, dos tiendas de ropa y complementos, dos locales de helados y yogures, una tienda de zapatillas, un local de estilismo y un hotel, además de siete cerrados, conforman un escenario un poco desolador en los soportales de la Plaza. Y más todavía observando que los locales cerrados son los de mayor superficie o extensión en su mayoría.
Como todo en la vida, hasta el lugar más bello tiene un lado oscuro; y la Plaza Mayor de Salamanca no iba a ser una excepción.
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2 comentarios en «El lado más oscuro de la Plaza Mayor»
No me extraña que cierren locales y negocios. Los clientes bajan y el IBI, por ejemplo, hay que seguir pagándolo aunque no haya negocio. Si se cierra, el IBI pasa a pagarlo el dueño del local. Y así todo. Beneficio para el Ayuntamiento. Siempre.
De esos siete, dos no están en la plaza y otro está cerrado por reforma.