Iberdrola ha continuado en 2021 reafirmando su papel como motor de la reactivación de la economía y el empleo en los países en los que opera. En el primer trimestre del ejercicio, el grupo incrementó sus inversiones -son récord histórico- hasta los 2.507 millones de euros (+45%).
Este esfuerzo inversor se ha focalizado en los negocios de redes (50% del total) y renovables (42%). Por países, Estados Unidos (725 millones de euros), Brasil (698 millones de euros) y España (546,5 millones de euros) concentran cerca del 80% de la inversión. El resto lo completan otros mercados europeos, el Reino Unido y Australia.
Este récord inversor ha ido acompañado de un buen comportamiento operativo: el Ebitda reportado crece un 2%, hasta los 2.814 millones de euros, incluyendo el impacto del COVID-19 (-65 M€) y del tipo de cambio (-231 M€). Excluyendo estos efectos, Iberdrola alcanzó en el primer trimestre del ejercicio un Ebitda de 3.110 millones de euros, un 12,2% más. A marzo, el 81% del Ebitda del grupo proviene de países con rating A.
El beneficio neto ajustado -sin considerar el impacto extraordinario de la desinversión de Siemens Gamesa realizada en el primer trimestre de 2020- aumentó un 12%, hasta los 1.082 millones de euros. El beneficio neto reportado se situó en 1.025 millones de euros.
El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha afirmado que “la aceleración de las inversiones nos permite crecer a un ritmo superior al previsto inicialmente, por ejemplo en España, donde estamos generando más de 30.000 nuevos empleos en nuestros suministradores. Iberdrola está utilizando toda su fortaleza financiera y liderazgo al servicio de la recuperación económica de los países en los que estamos presentes”.
La compañía registró 6.000 nuevas incorporaciones a la plantilla en los últimos 12 meses, de las que 2.500 contrataciones han sido en el primer trimestre del ejercicio. La actividad de la compañía está permitiendo la generación de 100.000 empleos en su cadena de valor globalmente.