El consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, y el presidente de la Fundación Toro de Lidia, Victorino Martín, han presentado en Medina de Rioseco la segunda edición del Circuito de Novilladas, que tendrá lugar entre junio y octubre, en las nueve provincias.
Ortega ha recordado que esta iniciativa surgió el pasado año ante de la necesidad de paliar las graves consecuencias económicas que la crisis sanitaria provocada por la Covid-19 ha tenido en los sectores culturales y, entre ellos, en el taurino.
Un impacto que ha sido especialmente negativo en la formación y carrera de los jóvenes aspirantes a profesionales taurinos, ya que la escasez de novilladas impide que los novilleros puedan realizar el número mínimo de las exigidas para completar su etapa de formación, ayudando a cubrir la etapa desde la formación en las escuelas de tauromaquia, hasta la toma de la alternativa como matador de toros.
Por su parte, Victorino Martín ha resaltado la importancia que tiene crear este tipo de proyectos para el mundo del toro: “Desde la Fundación Toro de Lidia buscamos, junto con las Administraciones, que los novilleros tengan más oportunidades para torear, fortalecer el engranaje del sector de las novilladas y fomentar los festejos en las distintas comunidades mostrando que los toros son uno de los elementos dinamizadores más importantes de la economía local, cuestión que ahora más que nunca las localidades necesitan”.
Persiguiendo estas metas se ha presentado el Circuito de Novilladas con picadores de Castilla y León, un certamen que tendrá lugar del 5 de junio al 24 de julio, y que está compuesto por 8 novilladas en las que participarán 9 novilleros y 18 ganaderías, todas ellas de Castilla y León, ya que cada tarde habrá duelo ganadero y la segunda ronda de semifinales serán un desafío ganadero (6 ganaderías) cada una.
El consejero ha destacado la importancia económica y la generación de un gran valor ecológico de la tauromaquia dentro de Castilla y León, ya que se trata de un sector cultural del que dependen aproximadamente 14.000 puestos de trabajo en la Comunidad y que contribuye a fijar población en el medio rural a través, fundamentalmente, de la ganadería de bravo, que sostiene buena parte de la gran extensión de la dehesa de Castilla y León.
De los nueve novilleros participantes, siete serán los novilleros más destacados de Castilla y León y dos novilleros que procederán de otras comunidades autónomas con las que se establezca un intercambio, basado en el principio de reciprocidad. La competición se establecerá en tres fases: la primera compuesta por tres festejos, en cada uno de los cuales intervendrán tres novilleros; los seis novilleros triunfadores en los festejos de la primera fase pasarán a unas dobles semifinales, y los tres mejores pasarán a la final.
Además, se celebrará un circuito de novilladas sin picadores entre los meses de agosto y octubre, constando de siete festejos, con la participación de 12 novilleros que serán seleccionados entre las escuelas de tauromaquia de Castilla y León, según el número de alumnos de cada escuela y el nivel de preparación de los alumnos.
Promoción y conservación de la tauromaquia
Esta segunda edición del circuito de novilladas mantiene la doble vertiente en la consecución de la finalidad de promoción y conservación de la tauromaquia. Por un lado, contribuyendo a amortiguar, aunque de manera modesta, los efectos de la crisis en los distintos estamentos del sector y por otra, seguir contribuyendo a la formación de los futuros profesionales taurinos. Este año el certamen se centra en proporcionar estas herramientas a la etapa que más dificultad encuentra, las novilladas picadas, cuyo coste económico ha supuesto en los últimos años una disminución radical en el número de estas y por tanto, un freno en las posibilidades de progreso de brillantes novilleros.
Para lograr estos fines, se ha confiado en la Fundación del Toro de Lidia, a la que la Junta ha concedido con este fin una subvención de 326.000 euros. Se trata de una entidad representativa del mundo taurino, con experiencia en la organización de este tipo de eventos, incluido el I Certamen de novilladas de Castilla y León, que tuvo gran éxito, y aporta una dimensión nacional a esta segunda edición, al posibilitar la movilidad de los novilleros entre los distintos circuitos de novilladas en otras comunidades autónomas, aumentando su proyección.
Calendario y participantes
La selección de los empresarios se realiza mediante convocatoria pública, con unos requisitos y criterios de valoración. Los empresarios aportan el compromiso del titular de la plaza, y el protocolo de prevención frente a la COVID-19, conforme con la normativa vigente en Castilla y León en cada momento. Tanto empresarios como ganaderías han de pertenecer a Castilla y León.
El consejero ha asegurado que “esta iniciativa de apoyo a la tauromaquia integra las señas de identidad de la política de promoción cultural desarrollada por la Consejería de Cultura y Turismo en esta legislatura, como son la dimensión regional, la cercanía con el mundo rural, el apoyo a los jóvenes valores y la búsqueda de nuevos públicos”.
El circuito celebrará festejos en las nueve provincias de la Comunidad, en plazas de tercera categoría, y se realiza en colaboración con las 4 escuelas taurinas existentes, en Salamanca, Medina de Rioseco, Palencia y Segovia. Todos los festejos se celebrarán con un estricto protocolo de medidas que garanticen la seguridad de los asistentes.
El calendario previsto para las novilladas picadas es el siguiente: la fase previa, 5 de junio, Herrera de Pisuerga, (Palencia); 12 de junio, Arenas de San Pedro, (Ávila), y 20 de junio, Lerma, (Burgos). Las semifinales, el 26 de junio, Sahagún, (León), el 4 de julio, Guijuelo, (Salamanca); el 10 de julio, Toro, (Zamora), y el 17 de julio, Medina del Campo, (Valladolid), para concluir con la final, el 24 de julio, El Espinar (Segovia)
Novilleros participantes en el circuito
Durante el acto se ha celebrado también el sorteo para determinar los carteles de las novilladas con picadores, en las que participarán 7 novilleros de Castilla y León (Antonio Grande, Daniel Barbero, Manuel Diosleguarde, Pablo Atienza, Pablo Jaramillo, Sergio Rodríguez y Valentín Hoyos) y 2 procedentes de otros circuitos de la Liga Nacional de Novilladas con los que hay un acuerdo de reciprocidad (Guillermo Garcia, del circuito de Madrid y El Niño de las Monjas, del circuito del Mediterráneo).
Las novilladas sin picadores contarán con la participación de 12 novilleros: 6 serán seleccionados por la Escuela de Tauromaquia de la Diputación Provincial de Salamanca, 2 por la Escuela Taurina de Medina de Rioseco, 2 por la Escuela Taurina de Palencia, 1 por la Escuela Taurina de Segovia, y un novillero que, siendo oriundo de Castilla y León y habiendo estado vinculado a alguna escuela taurina, ya no pertenezca a la misma, y que será seleccionado por acuerdo de las escuelas participantes.
Ganaderías participantes en el circuito
Las 18 ganaderías seleccionadas para participar en las novilladas picadas de acuerdo con los criterios establecidos han sido José Escolar y La Guadamilla (Ávila), Antonio Bañuelos (Burgos), Valdellán (León), Pedraza de Yeltes, Galache, Castillejo de Huebra, Valdefresno, El Pilar, José Cruz, Montalvo, Hoyo de la Gitana, Domingo Hernández, Ignacio López-Chaves, Hnos Sánchez Herrero, Antonio Palla y Puerto de San Lorenzo (Salamanca), y Raso de Portillo (Valladolid).