La I Cumbre de Presidentes de Consejos de Rectores de la Unión Europea, América Latina y el Caribe se ha clausurado este martes en la Universidad de Salamanca con la petición de crear un espacio común europeo de educación superior, ciencia, tecnología e innovación. Las primeras deducciones van encaminadas a pedir apoyo a los jefes de Estado y de Gobierno para su segunda asamblea (CELAC-UE) y crear un Comité de Seguimiento que asuma esta cooperación universitaria.
Representantes de universidades de la Unión Europea (UE), de América Latina y del Caribe han mantenido un encuentro en Salamanca este martes a modo de cumbre académica para sentar las bases de una colaboración estable entre sus sistemas universitarios con el objetivo de construir un espacio iberoamericano de estudios.
Un proyecto académicamente ambicioso para el marco universitario que de salir adelante compartirá valores, objetivos y características de los sistemas de educación superior de este programa al tiempo que se afianzarán los lazos entre continentes.
Ente los desafíos a realizar ante una nueva reunión, que puede ser dentro de dos años, está la creación de un Comité de Seguimiento y fijar una fecha del calendario para su realización, ante lo cual el rector de Salamanca, Daniel Ruipérez, a mostrado su deseo de que coincida con el VIII Centenario de la Universidad.
Conclusiones
Las conclusiones reunidas en esta I cumbre se han hecho oficiales de la mano del rector, Daniel Ruipérez; el rector de la Universidad de Cantabria, José Carlos Gómez Sal; el secretario general del Consejo Universitario Iberoamericano, Félix García Lausín; el secretario general ejecutivo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior de México, Enrique Fernández Fassnacht; y el presidente de la Conferencia de Rectores de Universidades de Polonia, Wieslaw Banys.
Entre los retos se ha resaltado el de solicitar a los jefes de Estado y de Gobierno en la segunda cumbre medidas y fórmulas para impulsar la creación de este espacio común de educación superior y del conocimiento.
En segundo lugar comprometer más a las universidades y destacar su disposición a colaborar en este espacio común participando en los foros y mecanismos que se promuevan y fomentando la colaboración en sus áreas prioritarias para el desarrollo.
Como tercer desafío se buscará profundizar en la movilidad académica, la cooperación entre instituciones e intercambio de experiencia y buenas prácticas en materia de docencia, investigación y extensión, haciendo un buen uso de los programas entre los que destacan el nuevo Erasmus +.
El cuarto punto es fomentar la participación de científicos de ambas regiones en proyectos de investigación estratégicos conjuntos.
Y por último, se acuerda crear un Comité de Seguimiento integrado por cinco representantes de cada una de las regiones (5 europeos y 5 americanos) más un representante del Consejo Universitario Iberoamericano que ejercerá la Secretaria del Comité.
Más presupuesto
Con la operación iniciada y las conclusiones sobre la mesa todos los representantes esperan que de su importancia se extraiga el suficiente convencimiento para recibir la financiación necesaria por los gobiernos. Los ponentes han incidido en la crisis que atraviesa Europa pero advierten que esto reforzará el trabajo para que este proyecto sea una realidad con las condiciones actuales y solicitar a las fuerzas políticas que se refuercen los fondos a las universidades.
