Ha muerto Rafael Borrás Beato, jefe del servicio de Urgencias del complejo hospitalario de Salamanca, a consecuencia de un infarto.
Rafael Borrás se encontraba disfrutando de unos días de vacaciones en Badajoz y ha muerto sobre las 06.00 horas de este sábado, 7 de agosto.
Durante toda la pandemia estuvo, junto a su equipo en primera línea. Gracias a sus testimonios fuimos conocedores de lo duro que fueron los primeros meses de pandemia.
Así supimos hace justo un año que la semana más dura con relación a la pandemia fue la del 23 al 29 de marzo, en la que se asistió a 1157 pacientes, siendo 972 en el hospital Clínico, de los cuales el 90% eran por el circuito Covid. El peor día fue el día 26 de marzo, que se asistió en el Clínico a 168 pacientes e ingresaron 70 de ellos.
Fue muy sincero al hablar de cómo había vivido él los primeros meses de pandemia. «Con una gran responsabilidad e intensidad, procurando siempre hacer un reparto justo de las cargas de trabajo y teniendo en cuenta que lo más importante era el paciente, que fuera atendido correctamente y que su estancia en urgencias fuera lo más cómoda posible. Los tiempos de permanencia por las pruebas eran muy prolongados y, además, teníamos que tener a las familias informadas».
Como anécdota, Rafael Borrás fue el primer trabajador sanitario de la provincia charra en someterse a la vacuna de Pfizer contra la COVID-19, acontecimiento ante el que se mostró «muy ilusionado» por ser «la herramienta más eficaz para detener esta pandemia».
Trabajador incansable, buen compañero, entregado a sus pacientes,… son calificativos que acompañan al nombre de Rafael Borras Beato.