Un joven turista británico perderá dos dedos de una mano tras sufrir la picadura de una araña reclusa marrón también conocida como violinista.
El chico estaba sentado en la escalera de acceso a la playa de San Antonio, para contemplar el atardecer.
En un momento dado sintió que algo le había picado, pero no pudo ver qué había sido. Tampoco le dio mayor importancia hasta que a las cinco de la madrugada se despertó con quemazón en la zona y una hinchazón considerable.
Fue al hospital y permaneció dos semanas ingresado mientras le hacían pruebas para saber la procedencia del veneno, hasta que se determinó que la picadura había sido obra de una araña violinista.
Su veneno puede ocasionar necrosis (muerte del tejido) en la zona de la picadura, que es lo que le ha ocurrido al joven turista, que ahora está a la espera de ser operado para amputarle los dos dedos afectados.
La araña violinista es originaria de Sudamérica, puede medir hasta 2 centímetros, su es de color negro, pardo o ceniza, dependiendo del hábitat en el que se encuentre, y tiene tres pares de ojos, dos menos de los habituales en los arácnidos.
Su veneno es 15 veces más tóxico que el de una cobra, y diez veces más que el ácido sulfúrico, aunque no afecta de la misma forma a todo el mundo.
En caso de sufrir su picadura, lo más recomendable es acudir con urgencia al hospital y para evitar que el veneno se extienda se recomienda poner una bolsa de hielo sobre la picadura y mantenerse en reposo, mantener la herida limpia y evitar rascarse en la zona afectada.
