La consejera de Sanidad, Verónica Casado, negó este viernes, ante la denuncia y dudas del PSOE, que se vayan a recortar los recursos sanitarios del medio rural para su trasvase a los centros de salud urbanos que están más masificados, si bien reiteró que no se puede “seguir igual y es el momento de hacer cambios”.
Ical.- En su comparecencia en la Comisión de Sanidad de las Cortes para exponer un balance de gestión en el ecuador de la legislatura y las líneas de acción para lo que resta de mandato, que se prolongó durante casi cinco horas, Casado pidió la colaboración de los grupos para el modelo que plantea.
“No podemos seguir igual, es el momento de hacer cambios, si no los hacemos, los problemas actuales van a ser una broma”, avisó la consejera, que solicitó la colaboración de los grupos y apuntó que a veces se trasladan informaciones de cierres que “generan miedo entre la gente”.
Casado reiteró este argumento en respuesta al socialista Jesús Puente, quien rechazó que se quiera cambiar la estructura del modelo -60 por ciento de profesionales en el medio rural y 40 por ciento en el urbano- por el problema coyuntural de falta de médicos. “No puede ser la única variable”, sostuvo.
“Nunca jamás, nunca, he dicho que voy a llevar médicos del medio rural a los centros urbanos que están masificados”, proclamó la consejera, que apostó por una reorganización de los profesionales en las zonas rurales y en las urbanas, con “un exceso de burocratización”.
Ante las dudas expresadas por el procurador socialista, la consejera defendió que tienen “muy estudiada” esa estrategia de reorganización, que se ha contado con los expertos y confió en que va a resultar positiva, al tiempo que añadió no entender por qué el PSOE se fue del grupo de trabajo tras consensuar las 122 medidas para la mejora del sistema.
Puente se mostró de acuerdo con una reordenación pero alertó de que no comparten que se cierren centros con menos de 400 cartillas y subrayó que, en este momento, se están produciendo trasvase de medios de los pueblos a centros urbanos.
La consejera argumentó que las 400 tarjetas en el mundo rural y las 1.500 en el urbano son “cupos óptimos” y añadió que las plazas no desaparecen, sino que “se ponen donde más se necesitan”.
Precisamente, el procurador del PP Alejandro Vázquez valoró que la consejera dijera que no habrá un trasvase de recursos de los pueblos a los centros de salud urbanos y que se mantengan los consultorios.
La titular de Sanidad avanzó que el próximo 13 de septiembre se reunirá con la presidenta de la FRMP, Ángeles Ármisen, presidentes de las diputaciones provinciales, delegados territoriales para exponer el modelo de reorganización sanitario, a la vez que habrá reuniones con cada área porque no existe homogeneidad.
