La compañía biomédica Nference ha publicado un estudio en el que detalla que la variante del coronavirus Ómicron podría haberse combinado con material genético del virus del resfriado común. Esta mutación podría ser la explicación de las altas tasas de contagio de esta cepa.
Según Venky Soundararajan, investigador del estudio publicado en la web OSF Preprints, al insertar un fragmento del virus del resfriado común en sí mismo, Ómicron podría parecer “más humano”. De esta manera, tendría una capacidad mayor para evitar el ataque del sistema inmunológico humano.
Atendiendo al estudio de Nference, esta variante se habría generado en una persona contagiada con COVID y que además tenía un resfriado. De esta manera, el virus SARS-CoV-2 se habría fusionado con un fragmento del virus que genera los resfriados comunes (HCoV-229E). Por lo tanto, con la fusión, habría ganado más capacidad de infección y, por el contrario, habría perdido virulencia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado a Ómicron como una variante “peligrosa”, ya que es una de las variantes más infecciosas. A pesar de ello, los síntomas son similares a los de las demás variantes de coronavirus y, aunque sea más contagiosa, es menos virulenta.
