Una mujer de 63 años ha muerto este domingo en Santomera (Murcia) como consecuencia de un atragantamiento con un trozo de pulpo que estaba comiendo.
La fallecida se encontraba en un bar de la localidad murciana, cercano a la plaza de la iglesia. Tras producirse el incidente, los empleados del establecimiento atendieron a la mujer y le realizaron un masaje cardiopulmonar hasta que llegaron las emergencias. Sin embargo, a la llegada de los efectivos, la mujer ya había muerto, según ha informado Telecinco.
Cuando una persona se atraganta, hay que practicarle la maniobra de Heimlich, una técnica muy efectiva para salvar vidas en caso de asfixia por atragantamiento. Este procedimiento, de primeros auxilios, tiene como objetivo desobstruir el conducto respiratorio, normalmente bloqueado por un trozo de alimento u otro objeto.
Para realizarla, con el atragantado de pie, se le abraza por la espalda con los dos brazos. Posteriormente se presiona con una mano cerrada y la otra sobre la primera. Una vez en este punto, hay que apoyar el puño con el pulgar sobre el abdomen y presionar hacia el centro del estómago (por encima del ombligo, bajo las costillas). Si el atragantamiento se produce cuando alguien está solo, debe coger una silla con respaldo y, cogiéndola por debajo del asiento, situarla por debajo de las costillas. Posteriormente, para lograr expulsar el objeto, hay que empujar con fuerza hacia arriba.
