El ‘no’ Fin de Año Universitario de Salamanca se saldó en la madrugada de este jueves con cuatro detenidos, otras tantas peleas y más de un centenar de denuncias.
Así lo refleja el parte nocturno de la Policía Local al que tuvo acceso la Agencia Ical, tras una celebración que no contó con acto oficial en la Plaza Mayor, suspendido por la creciente incidencia de COVID-19, aunque fuentes oficiales aseguraron hoy, con generosidad, que unas 300 personas ‘despidieron’ el año universitario en el ágora salmantina.
Cuatro personas resultaron detenidas esta noche a causa de diversas consideraciones. La primera de ellas, por una requisitoria en curso detectada por los agentes de la Policía Local en uno de los muchos controles dispuestos anoche en la capital del Tormes. Una segunda, se llevó a cabo en colaboración con la Policía Nacional por la presunta comisión de un robo con fuerza y dos más que tuvieron que ver con el devenir de la noche.
A las 4.30 horas en la céntrica calle Correhuela, según refleja el parte, los agentes trataron de apaciguar a un grupo de jóvenes que estaban “alterados”. Uno de ellos se dirigió con agresividad a otro en presencia de los policías, que procedieron a identificarle. Desde el primer momento se negó a facilitar su documentación y mientras le realizaban un cacheo empezó a propinar golpes al aire y rompió de un cabezazo la luna del coche sobre el que estaba apoyado. La Policía Local le detuvo por un presunto delito de daños y por otro de atentado a agente de la autoridad y le trasladó a dependencias hospitalarias antes de llevarlo a comisaría.
Más tarde, a las 5:50 horas en el cruce de la cuesta del Carmen con la calle Íscar Peyra se produjo la última de las detenciones. Los agentes vieron a un joven orinando en la vía pública, así que tratarlo de identificarle. Sin embargo, éste se negó y trató de zafarse de la situación acelerando el paso e ignorando las órdenes para que se detuviera. En un momento dado, uno de los policía le sujetó del brazo y recibió un manotazo. La secuencia se repitió y comenzó un forcejeo en el que el joven lanzó varios codazos al agente. Tuvo que ser reducido y detenido por un presunto delito de atentado.
Además de las detenciones, la Policía Local intervino para mediar en cuatro peleas y propuso más de un centenar de denuncias. Las más numerosas, por orinar en la vía pública, 45. Asimismo, los agentes denunciaron a 30 personas por ignorar alguna de las restricciones por la pandemia, incluidas 25 por hacer un uso inapropiado de la mascarilla o no llevarla puesta, y cinco más por fumar sin la distancia suficiente. Asimismo, los agentes atendieron 18 avisos por ruidos con siete denuncias con medida positiva.
Por otro lado, once personas fueron denunciadas por incumplir la ordenanza de Convivencia Ciudadana y una decena de personas recibió propuesta de sanción por consumir alcohol en la vía pública. Cuatro más fueron sancionados por tenencia y consumo de estupefacientes y tres por faltas de respeto a los agentes. También tres fueron las colaboraciones con los perros de la Policía Nacional. A una persona le intervinieron un arma blanca y otra fue remitida al juzgado por alcoholemia positiva. Finalmente, cerca de las 7.00 horas, los agentes desalojaron un after y levantaron acta de sanción por el uso de aparatos musicales sin licencia.