La galería El cuchitril presenta el 3 de febrero hasta 3 de marzo la exposición ‘Como en casa’, a cargo del polifacético artista Carlos Tmori
La muestra está compuesta por obra fotográfica abandonada y recuperada para ser intervenida y corrompida por ácidos, llegando a tomar un cariz inquietante y siniestro. Una exposición que no dejará indiferente a nadie.
“Si fuera verdad que una imagen vale más que mil palabras, esta vez, tendríamos unas palabras —negro/rojo y rojo/negro— como imagen. Así, después del negro materno, la primera luz que vio fue roja. Un espacio donde, tras fogonazos lumínicos, se esconden recuerdos olvidados de vidas anónimas. Es la luz de la oscuridad», explica José María Benéitez, comisario de la exposición.
Con elementos tan cotidianos, como los recuerdos olvidados de un viaje de verano, las ceremonias litúrgicas o una familia posando tras los diferentes azules de la línea del horizonte, Carlos TMori construye un modo de expresión que aprovecha lo doméstico y saca de un dark room toda una serie de imágenes que, con propósitos muy diferentes para los que fueron creadas, nos cuenta nuevas historias, en nuevos espacios.
Negro/rojo, un lugar para empezar a congelar el tiempo en trozos de papel; para recordar momentos
y dejar testimonio. «Tal vez ahí es donde encontró Carlos TMori su impulso a trabajar en un medio que, no hace mucho tiempo, las Academias y escuelas de Bellas Artes sólo contemplaban como registro o material de estudio. Incluso al séptimo se le da ese nombre por su rentabilidad económica», matiza Benéitez.
El vídeo y la fotografía son las principales herramientas de este artista que, a partir de ellos, trata de ofrecer un nuevo sentido a objetos que nunca fueron pensados para formar un discurso artístico; simples documentos de la vida de hombres y mujeres anónimos a los que se les ofrece la posibilidad de tener nuevas lecturas.
El descubrimiento de una caja con imágenes visuales, formato fotografía-color, de un tamaño estándar 10×15, es la materia de esta exposición. Esos documentos se manipulan con dos fines muy concretos: el primero, aumentar su anonimato. El segundo, extender así su vida. Aunque él no lo confesará nunca, en el fondo, la obra de Carlos TMori es un gran cómic, un retablo que ahora cuelga en paredes más blancas que las de las iglesias.
«¡Atención! Saquen sus álbumes, hay peligro, atacan los NFT», concluye Benéitez.
Sobre Carlos Trigueros
Es profesor ayudante doctor en el Grado de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca. Doctor en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid con la tesis «Vídeo arte doméstico en España», licenciado en Bellas Artes (1994) y licenciado en Comunicación Audiovisual (1998) por la Universidad de Salamanca. Desde 1987 trabaja en torno a la experimentación sobre vídeo, desarrollando prácticas como vídeo artista, vídeo jockey, programador de exposiciones y teórico-investigador sobre el medio, además de la realización de trabajos comerciales y publicitarios.
Como investigador sobre vídeo arte y audiovisual experimental ha redactado la mayor parte de los estudios sobre los vídeos de la distribuidora de audiovisual experimental español Hamaca, publicados en su web. Además, junto a Nekane Aramburu, publicó la primera historia del vídeo arte español: «Caras B de la Historia del Vídeo Arte en España» en 2011. Ha comisariado exposiciones de colecciones como «La casa» en el DA2, la muestra itinerante «Hogar, dulce hogar» para MUSAC y para el EACC (Castellón) la colección de vídeo arte de CA2M (Madrid) en la exposición «Hacia el fin de la tranquilidad».
Ha expuesto en el Museo Patio Herreriano (individual «[Caja Negra]», 2011-2012) o en el DA2 («Barrocos y Neobarrocos», 2007) y en la galería Benito Esteban (con exposiciones individuales en 2012, 2008 y 2005). Ha recibido en 2012 y 2011 las ayudas para artistas del Ministerio de Cultura y en 2010 tuvo una residencia artística en el MA Studio (Pekín). Entre su producción audiovisual más distinguida se incluyen obras como Castilla Penitente de 1991, Durch de 1992, Koji de 1998, Inestabilidad & Metamorfosis de 2005, Learning about cells de 1987-2007, Nieve alienada de 2009, o el videoclip para el grupo musical Esplendor Geométrico El arte amenazado por la vulgaridad en 2013 o La gota de anís para Javier Corcobado en 2015 y vídeos para el grupo Atom Rumba o Markus Breuss en 2017.
