El Banco de España ha explicado qué se debe hacer en el caso de que los usuarios se encuentren con un billete roto o deteriorado. En ocasiones, al intentar pagar con estos billetes ponen pegas o incluso no los aceptan.
Recibir algún billete roto o deteriorado es algo habitual. Si a esto le añadimos el hecho de que somos nosotros los que podemos romper el billete, sea por descuido o por que se enganche en una cremallera. En estos casos pueden producirse complicaciones a la hora de pagar con ellos, puesto que los establecimientos no los acepten o las máquinas los rechacen.
Para estas situaciones, el Banco de España ha explicado qué se debe hacer. Según el organismo, los billetes manchados, que se hayan mojado o quemado, o que les falte algún trozo, podrán ser canjeados por uno nuevo de igual valor. No obstante, para ello es necesario acudir a la sede del Banco de España o a alguna de sus sucursales para proceder a su reconocimiento. De esta manera, en caso de que no hubiera nada extraño se procederá al canje por un billete nuevo.
Otro de los requisitos para efectuar el cambio pasa por presentar más de la mitad de la superficie original del billete. Sin embargo, también se podrá demostrar que la parte ausente se ha destruido. “Si el billete está muy deteriorado será analizado por personal cualificado en la Unidad de Análisis de Billetes, que determinará si el billete es legítimo y objeto de abono”.
La última opción consiste en acudir a una entidad bancaria y solicitar el cambio de billete. A pesar de ello, hay que recordar que los bancos no están obligados a prestar el servicio de cambio de billetes rotos, porque “no existe ninguna normativa legal expresa que así lo exija”.