Un estudio ha enumerado una serie de síntomas que padecen los vacunados tras una infección por ómicron.
La investigación, publicada en la revista Eurosurveillance, ha determinado ocho síntomas clave en el grupo de personas analizado. Estos fueron: tos, secreción nasal, fatiga, dolor de garganta, dolor de cabeza, dolor muscular, fiebre y estornudos. Dentro de ellos, los más comunes fueron la tos, el goteo nasal y la fatiga. Algunos expertos en salud pública han destacado las náuseas como otro de los síntomas que pueden aparecer en las personas vacunadas que contraigan la variante ómicron.
A pesar de que la vacuna protege contra los riesgos más graves del coronavirus, por el momento no evita la infección. Sin embargo, las personas que cuentan con la pauta de vacunación suelen presentar una sintomatología más leve, dificultando distinguir la infección por coronavirus de un resfriado común.
Para diferenciar estas dos patologías, hay dos síntomas que podrían significar que se trata de ómicron: la fatiga y los mareos. En primer lugar, la fatiga puede causar dolor físico o muscular, dolores de cabeza, pérdida del apetito e incluso visión borrosa. En este sentido, una encuesta elaborada por Web MD indica que el 40% de las mujeres reportaron haber sufrido fatiga debido al COVID. En cuanto a los mareos, un informe realizado en Alemania ha determinado que existe un vínculo entre este síntoma y la infección con ómicron.
