Berkeley Minera continúa apostando por la construcción de la planta de uranio en Retortillo para cubrir la demanda nacional. Según afirmó el presidente de la empresa, Francisco Bellón, con la revisión del proyecto y teniendo en cuenta las aclaraciones proporcionadas al Ministerio, la construcción de la planta de Retortillo podría iniciarse “de manera inmediata”.
ICAL. Una decisión que, tal y como trasladó Berkeley en un comunicado, daría una “solución a la dependencia de países con alto riesgo geopolítico” en un periodo de 18 meses, en el que España podría suministrar el equivalente a la importación actual de uranio proveniente de Rusia. Además, señaló que el país podría cubrir la totalidad del combustible para las centrales nucleares españolas durante más de 10 años.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) informó el pasado noviembre a Berkeley Minera España de la denegación de la autorización de construcción de la planta de fabricación de concentrado de uranio de Retortillo. Tras el informe desfavorable del Consejo de Seguridad Nacional (CNS) y esta decisión, Berkeley remitió documentación al Ministerio a través de la cual “argumenta y da explicaciones a todas aquellas razonas que han servido de base para la denegación de la licencia”. Una documentación que, según la empresa, está validada por expertos internacionales y de la que aún no han obtenido respuesta.
Berkeley insiste en esta petición para poder explotar las reservas de uranio nacionales, “las más importantes de la Unión Europea”, según la empresa minera, y que dotarían de una capacidad total para cubrir la demanda y no depender de terceros países con “inestabilidad” y una “fiabilidad jurídica cuestionable”. Actualmente, según datos de ENUSA de 2020, España importa un 38,7 por ciento de uranio de Rusia, un 22,3 por ciento de Canadá, un 19,5 por ciento de Níger, un 11 por ciento de Kazajistán, un 3,7 por ciento de Namibia, un 2,5 por ciento de Uzbekistán y un 2,3 por ciento de Australia.
El proyecto de Retortillo, tal y como detalló Berkeley en el comunicado, impulsará el desarrollo de la provincia salmantina, con una creación de 500 empleos directos, que podría ampliarse hasta los 1000 según avance el proyecto. La previsión por parte de la empresa minera es de una inversión de 400 millones de euros en la localidad, de los cuales ya se han realizado 95, y que supondrán una recaudación de 23 millones para la Hacienda Pública y unos ingresos a los ayuntamientos de la zona de en torno a 1,5 millones de euros.