Iberdrola, a través de su Fundación en España, mantiene su apoyo a las víctimas de la guerra en Ucrania y acaba de firmar sendos convenios con la Cruz Roja y con el Comité español de Acnur para hacerles entrega de 500.000 euros a cada uno de estos organismos que trabajan en diferentes programas de ayuda humanitaria.
Iberdrola anunció este compromiso durante su participación en el evento que organizó Global Citizena través de la campaña Stand Up for Ukraine, que ha unido a activistas y líderes empresariales.
La presidenta de la Comisión Europea,Ursula von der Leyen, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, han colaborado en la organización de este evento para apoyar a quienes han tenido que huir de sus hogares en Ucrania.
Global Citizen aboga por la solidaridad con las comunidades de todo el mundo que se enfrentan a desafíos importantes como la guerra, la pobreza, la injusticia climática y las desigualdades.
En cuanto al convenio firmado con la Cruz Roja, de otros 500.000 euros, está enfocado a nutrir los 18 proyectos con los que cuenta ya la institución para la primera atención y la inserción social a medio-largo plazo de los refugiados ucranianos. En España, más de 37.000 personas ya han sido atendidas en todo el territorio nacional en este primer mes de conflicto, y cerca de 11.000 han sido alojadas en recursos gestionados por la organización. Para hacerlo posible, ha movilizado cerca de 3.000 personas voluntarias que participan en tareas de logística, traducción, cobertura de las necesidades básicas, información jurídica o atención a la infancia, entre otras.
Iberdrola, en el inicio de la guerra, ya se puso a disposición de la administración central para, de forma coordinada, colaborar en esta crisis humanitaria. Se envió un primer lote de 20 generadores eléctricos para mantener el funcionamiento de servicios especiales como hospitales, refugios o plantas de tratamiento de agua.
También a través de su programa Voluntarios por Ucrania, los empleados de la compañía donaron ocho toneladas de material humanitario que fueron enviados hasta diversos centros logísticos de Polonia, para que las autoridades ucranianas hicieran uso de ello.
Iberdrola ha puesto a disposición del Gobierno central su Campus de Innovación y Formación de San Agustín de Guadalix para enseñar español a los refugiados, así como habilidades que faciliten su adaptación y su inserción en el mercado laboral, prestando especial atención a las mujeres y a los menores.