El osezno que fue encontrado en estado crítico en la provincia de León evoluciona favorablemente tras diez días de cuidados intensivos en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres de Valladolid, donde está siendo atendido desde entonces. El animal fue hallado por un particular en la localidad de Colinas del Campo de Martín Moro Toledano (León), perteneciente al municipio de Igüeña.
Según explican desde el Ejecutivo regional en un comunicado recogido por Ical, el ejemplar está experimentando una clara mejoría, aunque todavía presenta secuelas del fuerte traumatismo recibido y el equipo de veterinarios de los centros de fauna de la Junta de Castilla y León sigue monitorizando al esbardo para ver su evolución.
En los primeros días de su llegada al CRAS se encontraba en estado crítico con pronóstico reservado, presentando estupor y reflejos disminuidos. Conforme han pasado los días, mostraba desde periodos de alerta ocasionales hasta encontrarse completamente atento con respuesta a estímulos ambientales que le rodean, si bien aún se tienen dudas respecto a su visión, ya que presenta estrabismo y ausencia de reflejos pupilares.
A finales de la semana pasada comenzó a poder incorporarse sobre las extremidades posteriores, llegando a poder mantener el equilibrio en estación por cortos periodos de tiempo, hasta que finalmente ha conseguido caminar, correr y trepar, aunque con poca coordinación.
Actualmente se encuentra completamente aislado en las instalaciones del CRAS de Valladolid, alimentándose por sí solo y mostrando un comportamiento propio de ejemplares de su edad. Aunque ha presentado una mejoría y ya se encuentra fuera de peligro, aún es necesario continuar valorando al ejemplar y realizar pruebas diagnósticas para poder determinar el pronóstico de las lesiones que presenta.
En los próximos días, y una vez realizadas nuevas pruebas diagnósticas complementarias, será trasladado a una instalación específica para osos pardos en el Centro de Recuperación de Fauna en Villaescusa, en colaboración con el Gobierno de Cantabria.
El objetivo es poder realizar un seguimiento exhaustivo y que continúe su desarrollo de manera normal, en condiciones de mínima intervención humana. Si la evolución es favorable y el ejemplar es apto para su reintroducción al medio natural, se le trasladará a las instalaciones para la aclimatación de osos pardos que tiene la Junta de Castilla y León en la finca de Valsemana, en la provincia de León, en condiciones de semilibertad, siguiendo las experiencias de las oseznas Saba y Éndriga, que fueron reintroducidas con éxito tras su paso por estas instalaciones.