Durante esta última noche, los equipos de grabación automática instalados en las diferentes cavidades de la osera han podido registrar imágenes del osezno en buenas condiciones. Los técnicos de la Junta y de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León monitorizan la cueva desde el pasado lunes con cámaras endoscópicas y pértigas, pudiendo confirmar entonces que la osa estaba viva, aunque se desconoce el alcance de las lesiones.