En el espacio comprendido entre Chamberí y Tejares y en la zona del Marín- Huerta Otea, se están ‘construyendo’ los corredores verdes, dentro del plan Tormes-Plus. Tremendo despropósito este de destruir los suelos, las praderas y los arbustos naturales para «naturalizar» las márgenes del Tormes y construir nuevos espacios de ocio.
Pocos espacios para el ocio pueden ser más auténticos y gozosos que los ofrecidos por la misma Naturaleza. No es necesario enmendarla ni destruirla. Por eso, a la asociación Comité Antinuclear y Ecologista de Salamanca le parece «un disparate lo que está ocurriendo con el Tormes».
Para gozar de la belleza de lo natural la gente se desplaza a cientos y hasta a miles de kms. Y esto ocurre porque muchas veces los parques, los ríos o los montes próximos están excesivamente domesticados e intervenidos, ambas riberas se tenían que haber tratado de forma mucho más respetuosa. El paisaje resultante sería más complejo, más «difícil», pero absolutamente necesario a estas alturas en las que nos estamos cargando el Planeta.
Unas 10 hectáreas en la margen izquierda, donde sólo se respeta la franja de vegetación más próxima al río, y otras 23 hectáreas en la margen derecha están siendo radicalmente transformadas para crear «una calle más» según el alcalde Carbayo. «Los suelos y la vegetación que había, en algunos casos con una rica biodiversidad, han sido eliminados para echar encima rocas y tierra para así amoldar el terreno a las necesidades de un parque ‘urbano’. Y arremeter, también, contra la función de las riberas de zona inundable», puntualizan desde la asociación.
Se han movido miles de metros cúbicos de tierra, la maquinaria pesada en continúo trasiego compacta y destruye los pocos metros de suelo que se podrían salvar. Esa maquinaria emite importantes cantidades de gases de efecto invernadero, contribuyendo aún más al calentamiento global. «Y el único problema que tenía y sigue teniendo esta zona, el ruido procedente de la autovía A-62, no se corrige con una adecuada pantalla acústica», matizan desde la asociación.
Los suelos, esa maravillosa maraña de vida increíblemente compleja, tardan muchos años en formarse, por eso lo más importante es conservarlos en casos como este de las riberas. «Si el alcalde quería construir unos caminos se debería de haber actuado exclusivamente sobre el espacio que debían ocupar y no sobre todo el territorio. Caminos que, además, ya existían y que con unas pequeñas mejoras podrían haber quedado perfectamente accesibles. El problema está en que para el alcalde su objetivo no es ambiental, sino económico. Y esa es la razón por la que vamos a tener unos corredores verdes como una calle más de Salamanca», concluyen.
3 comentarios en «Corredores verdes: miles de m2 son arrasados en las riberas del Tormes»
Totalmente de acuerdo, pero no servira de nada. El ayuntamiento es insensible y arrollador (y tiene sus propios intereses), y la sociedad anda a lo que anda. Osea, qye camino allanado para lo que quieran
Pero ¿quién asesora al ayuntamiento en medioambiente? ¿Confunden la naturaleza con un campo de golf?. Es que solo conocen de vegetales el cesped de un campo de futbol? ¿Nadie tiene noción de lo que es un bosque de ribera?. ¿´Ésta es la capital de la cultura?
Solo falta que coloquen cesped artificial como en la ribera del río que lleva a la Aldehuela,