IU considera que la mejor opción para la gestión del autobús urbano es la gestión directa, es decir la remunicipalización del servicio, aunque «el equipo de gobierno ha dejado claro que no está por la labor», indica Virginia Carrera, concejala de la coalición en Salamanca.
En palabras de Carrera, «lo primero que hay que hacer es realizar una evaluación de la situación y mantenimiento de las instalaciones, para evitar situaciones como las ocurridas en el ‘caso Eulen’ con las piscinas municipales».
Entre las medidas planteadas por IU destaca incorporar una tercera puerta de doble hoja en aquellos vehículos con longitudes superiores a los 10 metros, «incorporar en las señales y marquesinas de las paradas información como el código postal más cercano, el nombre de un edificio o lugar significativo o las líneas que transitan por esa parada».
También Izquierda Unida propone que la empresa realice una encuesta de satisfacción del servicio de carácter anual.
Respecto a la plantilla solicita que se garantice la cobertura de bajas médicas de todas las categorías y no en conjunto global, así como conocer el ratio de personal que se necesita para poder configurar una plantilla acorde con las necesidades de los usuarios. Carrera ha propuesto la conversión a personal indefinido de los contratos temporales para garantizar que el servicio cumple con unas condiciones estables para la plantilla y cumplir con la reforma laboral.
Respecto a cuestiones que los pliegos no recogen, Izquierda Unida propone que las empresas que concursen tengan obligatoriamente que tener Plan de Igualdad y que no se subcontrate el servicio de limpieza.
Por último se propone la figura del inspector de calle, «puesto de vital importancia para subsanar las deficiencias del servicio así como para asegurarse del correcto funcionamiento del servicio de transporte urbano de viajeros».
